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Activistas de Greenpeace se manifestaron frente a la embajada de Estados Unidos, en la Ciudad de México , para expresar su rechazo a la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de retirar a su país del Acuerdo de París, en el que los países buscan hacer frente al cambio climático.
Esta actividad forma parte de las protestas que la organización ambientalista realiza alrededor del mundo para demostrar que la lucha contra el cambio climático sigue, pese a la decisión de Trump. Pidió al gobierno de México respaldar el acuerdo en la Cumbre del G20, programada para el próximo julio.
El pasado 1 de junio, Trump anunció que se retiraría del Acuerdo de París, lo que desató las críticas de la comunidad internacional, a las que Greenpeace se ha sumado.
De acuerdo con la organización ambientalista, la decisión costará a Estados Unidos su posición de liderazgo mundial y su parte de los beneficios económicos de la transición de la energía limpia.
"Trump está entregando el liderazgo global de Estados Unidos a los líderes del mundo real que están aprovechando el impulso para proteger su país y el clima mediante la transformación de sus economías a la energía limpia. Estamos presenciando un cambio sísmico en el orden mundial, mientras Europa, China y otros, lideran el camino”, aseveró Jennifer Morgan , directora Ejecutiva de Greenpeace Internacional.
La directora de la organización ambientalista señaló que la acción climática global no está sujeta a un debate legal o político, sino que es una “obligación ética” proteger a la gente y al planeta. “Es una decisión moralmente pobre y Trump lamentará haberla tomado”, señaló.
El director ejecutivo de Greenpeace México, Gustavo Ampugnani , afirmó que este es otro desatino de Trump y demuestra su “desprecio” a los diferentes sectores la sociedad global que desde hace años demanda acciones concretas de sus gobiernos para reducir la emisión de gases de efecto invernadero de manera urgente, a fin de moderar los impactos del cambio climático.
México es un país altamente vulnerable a los impactos derivados del cambio climático, lo que empeora las condiciones de pobreza y exclusión que hoy enfrentan millones de mexicanos.
Más allá de condenar pública y diplomáticamente la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París, el gobierno mexicano debe consolidar sus esfuerzos para cumplir con los compromisos asumidos por nuestro país a nivel internacional, mismos que permita alcanzar la meta de reducir las emisiones para estabilizar la temperatura promedio del planeta en no más de 1.5 grados centígrados.
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