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pedrovillaycana@eluniversal.com.mx
La situación similar que vive México con países como Siria o Irak y de naciones donde hay un sistema autoritario como en Rusia, donde se amedrenta y asesina a comunicadores, deriva en que no haya un periodismo independiente.
“Es decir, lo increíble es que todavía en México hay una prensa nutrida”, consideró Jon Lee Anderson, periodista que ha cubierto guerras en Centroamérica, Libano y Afganistán.
En entrevista con EL UNIVERSAL, resaltó que la falta de un Estado de derecho es uno de los factores por el que los casos de periodistas mexicanos asesinados no se esclarezcan y asegura que, a pesar de que suene infantil, el gremio periodístico en México debe exigir justicia por la muerte de reporteros, poner plazos para esclarecer estos ataques, así como informar a la sociedad lo delicado que esta situación representa.
¿Qué impresión tienes de la situación que vive el periodismo en México?
—Contando la muerte de Javier Valdez y los demás muertos de años atrás, se confirma la impresión que se tenía desde hace unos años de que en México es muy difícil ejercer la profesión por el hecho de que ahí te matan.
México sólo se compara con algunos países en guerra como Siria, Irak o Afganistán y fuera de países en guerra se compara con países en donde hay un sistema autoritario como en Rusia, donde se amedrenta y asesina a suficientes periodistas para que no haya un periodismo independiente, es decir, lo increíble es que todavía en México hay una prensa nutrida, me consta porque he ido a México.
Cuando se trata de cualquier tema que tiene que ver con la corrupción verdadera en México, toca a lo que es más gordo en México, que tiene que ver con narcotráfico, corrupción, vínculos con las fuerzas del orden público y digamos los políticos en turno, y obvio es por esa razón que se mueren tantos periodistas y quedan sus muertes en la impunidad.
La matemática es muy clara, cuando uno va por el mundo y ve por dónde asesinan a periodistas es en países donde no funciona el Estado de derecho.
Entonces, ¿desde el exterior la concepción que se tiene del periodismo en México es mala?
—La óptica desde afuera es que está muy mal la situación de los periodistas. En ese sentido, hay una sensación generalizada de que México es un país con una cara puesta al mundo por parte de sus políticos y su gran empresariado. Pero también existen en una especie de burbuja real que operan en la penumbra, en una especie de tinieblas que es parte aparentemente de la vida política mexicana. Si no fuera así, no moriría tanta gente con tanta impunidad. Está muy claro.
¿La situación que se vive en México es generalizada en América Latina o es un caso extraordinario en la región?
—América Latina en general padece de este problema de impunidad, de corrupción y de falta de Estado de derecho (...). ¿Qué pasa? La explicación es falta del Estado de derecho.
En Inglaterra hay asesinatos y estoy seguro, no exagero si digo que de 500 asesinatos, 487 están esclarecidos y los culpables puestos en la cárcel, mientras que en México lo que nos dicen las comisiones investigadoras, nada más en cuanto a los periodistas, menos de 2% de los homicidios están esclarecidos, ni hablar de las decenas de miles que mueren en la llamada “guerra contra el narco”.
En México lamentablemente es más agudo y exacerbado por dos cosas: por su cercanía con Estados Unidos, por el gran mercado de consumo de drogas a Estados Unidos, por el gran mercado de venta de armas en Estados Unidos y por su situación geográfica intrínseca. México padece de ese lastre latinoamericano, pero se siente que las muertes son mayores debido a que es el último punto antes de que la droga llegue a Estados Unidos, entonces se pelean la plaza, no solamente los delincuentes de los cárteles, sino la policías, oficiales, políticos y gobernadores.
Nada más hay que mirar a la gubernatura de Javier Duarte, ¿por qué mataron a tantos periodistas? Uno preguntaba al gobierno y éste se hacía de la vista gorda. Estando él [Duarte] en el cargo, como que el gobierno federal le daba el respaldo a pesar de todas las evidencias contrarias de que de cierta forma avalaba a los que mataban y a los que traficaban.
¿Qué tendría que hacer el gremio periodístico ante esta situación?
—Exigir justicia, aunque suena pueril. Se debe exigir el esclarecimiento específico en torno a casos específicos con fecha límite para exigir al gobierno que investigue a su propia gente.
El gremio periodístico tiene que poner garras en sus exigencias y realmente pedir esclarecimientos de casos específicos. También tiene que hacer investigaciones en alianza con grupos o gente de afuera, porque están menos expuestos físicamente, para casos específicos en donde se nota o detecta la mano de algunos culpables, sobre todo si son oficiales o políticos.