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Para combatir la tala de especies forestales y extracción ilegal tanto de fauna como de flora silvestre, se implementó el Operativo Frontera Sur 2017, en donde fueron asegurados casi 2 mil 500 metros cúbicos de madera, más de dos toneladas de carbón vegetal y vehículos; y 50 ejemplares de vida silvestre.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Gendarmería Ambiental implementaron el Operativo Frontera Sur 2017 que abarcó los estados de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán, en los cuales se estableció, durante cinco días continuos, vigilancia permanente en las Áreas Naturales Protegidas del Sureste del país.
Como parte del combate de la tala de especies forestales y extracción ilegal de especies de fauna y flora silvestre, la Profepa dispuso de 70 inspectores federales, adscritos a las Subprocuradurías de Recursos Naturales e Inspección Industrial, con el apoyo de 210 elementos de la Gendarmería - Misión Ambiental.
Durante el operativo se decomisaron cerca de 50 ejemplares de vida silvestre: tortugas, cocodrilo, cotorras, pericos, loros, orquídeas e incautó pieles, cornamentas, además de carne de venado, pecarí, armadillo y cocodrilo.
Las acciones fueron encaminadas a atender las principales zonas de tala, caza furtiva y tráfico de especies de vida silvestre, además de combatir el tráfico ilegal internacional de las mismas.
El operativo consistió en 108 acciones: 35 filtros de revisión al transporte de materias primas forestales, productos y subproductos de vida silvestre; 39 recorridos de campo en zonas de alto índice de tala clandestina y caza furtiva; además de 23 inspecciones a Centros de Almacenamiento y Transformación (CAT) que operan irregularmente, cinco inspecciones a predios y cuatro inspecciones a Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA).
Igualmente, nueve acciones en materia de Inspección Industrial, donde se revisaron 124 contenedores de madera para exportación en el Recinto Fiscal Portuario de Progreso, Yucatán.
Por otro lado, la inspección y vigilancia permitió el aseguramiento de: dos mil 492 metros cúbicos de madera de especies tropicales como Caoba (Swietenia macrophylla), Granadillo (Dalbergia sp), Chicozapote (Manilkara zapota), Tzalam (Lysiloma sp.), Machiche (Lonchocarpus castilloi), Katalox (Swartzia cubensis), Mangle blanco(Laguncularia racemosa), Pino (Pinus sp) y Cedro rojo (Cedrela odorata), éste último considerado en riesgo, además de ser codiciado en el mercado asiático.
También se aseguraron 2 mil 053 kilos de carbón vegetal; 488 folios forestales,remisiones y reembarques por uso indebido, y tres vehículos,dos camiones rabones y un camión de redilas.
Respecto a la vida silvestre, se rescataron 47 ejemplares: 27 quelonios, un cocodrilo, un loro, seis cotorras, tres pericos y nueve orquídeas; entre los que destacan: cotorra cucha, cotorra guayabera, perico azteca, tortuga hicotea, loro cabeza amarilla.
Asimismo, 42 subproductos de vida silvestre, pieles y cornamentas de mamíferos silvestres y 28.8 kg de subproductos de vida silvestre, carne de venado, pecarí, armadillo y cocodrilo.
La vigilancia y atención de la denuncia se centró en seis Áreas Naturales Protegidas de jurisdicción federal: Calakmul, en Campeche; La Encrucijada y El Ocote, en Chiapas; Bala’an K’aax, en Quintana Roo; Pantanos de Centla, en Tabasco; y Ma´ax Yetel Kooh, en Yucatán.
También se realizó la reubicación de ocho ejemplares de manatí en la zona de las playas de Catazajá, en el estado de Chiapas, zona colindante con el estado de Tabasco.
Como medidas de seguridad, se impusieron las siguientes acciones: la clausura a ocho Centros de Almacenamiento y Transformación de Materias Primas Forestales; la suspensión de cuatro Predios con aprovechamiento forestal irregular y de una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA), así como la puesta a disposición de cinco personas ante el Ministerio Público Federal.
lsm
