Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis de México, informo que el sacerdote Miguel Ángel Machorro Alcalá pasó buena noche y que su condición pulmonar mejoró. Sin embargo, el vocero religioso advirtió que por la tarde se le realizará de nuevo una broncoscopia.
A ocho días de que ocurrió el atentado dentro de la Catedral metropolitana, el sacerdote Machorro permanece con intubación endotraqueal y en terapia intensiva.
El día de ayer, durante la homilía dominical se oró por su pronta mejoría y el cardenal Norberto Rivera Carrera agradeció la pronta actuación de las autoridades capitalinas para trasladar al párroco herido al hospital, pues aseguró que de tardar más, el presbítero habría muerto desangrado.
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