No existe evidencia de mortandad de moluscos, crustáceos, peces o mamíferos marinos en alguna parte de la Laguna Ojo de Liebre, Baja California Sur, como resultado de un derrame de salmuera residual dentro de las instalaciones de Exportadora de Sal, S.A. de C.V., afirmó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Tras realizar estudios sobre la salinidad del agua en la Reserva de la Biosfera El Vizcaíno se constató que los índices están en condiciones normales con valores promedio de 35.23 Unidades Prácticas de Salinidad (UPS), equivalentes a gramos por cada litro de agua, tanto en superficie como en el fondo.
Por su parte, el Notario Público No. 21,Marcos Rogelio Espinoza Cota, con sede en el Estado de Baja California Sur, dio fe que en las áreas de producción de Exportadora de Sal no se apreciaba algún derrame de aguas salitrales o concentrados hacia el complejo Lagunar Laguna Ojo de Liebre.
En coordinación con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), elementos de la Profepa realizaron un recorrido por las siguientes áreas: concentración, almacenamiento de salmuera amarga, Puerto Chaparrito, y según consta en la fe notarial no se apreció ningún derrame de aguas salitrales o concentrados hacia el complejo lagunar Laguna Ojo de Liebre.
La salinidad de la Laguna Ojo de Liebre se mide de manera continua, cada 10 minutos, los 365 días del año, con ayuda de dos estaciones de medición de parámetros fisicoquímicos del agua.
Durante el mes de febrero de 2017 se tomaron 4 mil 32 mediciones en la estación ubicada en el Canal de Ballenitas, siendo el valor promedio 37.57 UPS, máximo 38.98 y mínimo 35.57, lo cual es normal para una laguna costera que no tiene afluente de agua dulce.
Un aumento de salinidad en el sitio afectaría primero y antes que nada a los organismos marinos sésiles (aquellos que no pueden moverse) como es el caso de los moluscos; y a los que tienen una movilidad limitada (crustáceos como los cangrejos).
Otros organismos, como los peces, pueden ser sensibles a la salinidad, no obstante, por ser móviles, tienden a escapar de las condiciones adversas en las que se puedan encontrar.
“Esta dependencia señala que no existe evidencia de mortandad de moluscos, crustáceos, peces o mamíferos marinos en alguna parte de la Laguna Ojo de Liebre a partir del 16 de marzo, cuando ocurrió un derrame de salmuera residual dentro de las instalaciones de Exportadora de Sal, S.A. de C.V.”, enfatizó.
En días pasados un medio digital dio a conocer un video en el que se muestra el vertimiento de salmuera a un canal interno ubicado a 2 kilómetros de distancia de distancia de la Laguna Ojo de Liebre y que no tiene conexión con el mar.
En esa misma fecha, un vaso de salmuera residual rompió un dique de contención y derramó parte de ésta a un canal de operación que se utiliza para trasladar salmuera entre diferentes vasos dentro de la instalación industrial, mediante un sistema de bombeo.
El Canal que recibió la salmuera se encuentra dividido por diversos diques transversales, por lo que no tiene conexión alguna con el mar, lo que permitió que la salmuera quedara confinada en el mismo canal.