La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que agentes de la Policía Federal encontraron en un autobús que se dirigía de la ciudad de Puebla a la de México, 155 reptiles y anfibios en costales de manta, entre ellos 96 sapos gigantes y 30 tortugas casquito.
Precisó que dos inspectores de la Subprocuraduría de Recursos Naturales de la Profepa llevaron a cabo la identificación de los ejemplares, entre los que también había 22 tortugas pavorreal, seis iguanas negras y una tortuga blanca.
Los reptiles y anfibios fueron encontrados el pasado 1 de noviembre por elementos de la Policía Federal durante una inspección vehicular llevada a cabo en un autobús en la caseta de San Marcos, ubicada en el kilómetro 43 de la autopista federal México-Puebla, con dirección a la Ciudad de México.
Según información de la Profepa, los ejemplares eran trasladados en costales de manta en el portaequipajes del autobús y fue identificado el responsable del tráfico de vida silvestre, quien provenía del estado de Veracruz para hacer entrega de los animales en la capital del país.
La dependencia destacó que en auxilio del Ministerio Público de la Federación, adscrito a la agencia de Chalco de la Procuraduría General de la República (PGR), llevó a cabo la valoración e identificación de los reptiles y anfibios, a fin de proporcionar el dictamen pericial que sustente la acusación contra la persona detenida por la Policía Federal.
Clausuran Isla del Amor. En otro operativo, la Profepa clausuró de manera “total temporal” las actividades de cambio de uso de suelo en el predio conocido como Isla del Amor, ubicada en el municipio de Alvarado, Veracruz, donde se colocó una reja metálica que impide el libre tránsito de personas a la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat).
Durante una visita de inspección en materia de impacto ambiental, por actividades en ecosistemas costeros, se observó la instalación de una reja metálica de 43.80 metros de largo por tres metros de alto para restringir el acceso al predio.
La medida de seguridad se impuso toda vez que el inspeccionado no acreditó contar con autorización de cambio de uso de suelo ni de impacto ambiental emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
“Es importante destacar que las obras existentes en el predio se encuentran colocadas en propiedad federal, por lo que debe contar con el título de concesión correspondiente”, precisó la Procuraduría Federal.