No basta con que niñas, niños y adolescentes se expresen, los gobiernos y la sociedad civil tienen la obligación de garantizar a los menores que sus opiniones sean tomadas en cuenta para generar políticas públicas que salvaguarden sus derechos.
Durante la presentación del informe “La infancia cuenta en México 2016” de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), miembros de organizaciones civiles, legisladores y el representante de Unicef en México, Christian Skoog coincidieron en que es necesario que se considere a los niños como ciudadanos y que se fomente su participación en diversos ámbitos del país. “Participar es su derecho y nuestra obligación garantizarlo”, dijo Skoog.
En su participación Juan Martín Pérez García, coordinador ejecutivo de la Redim, advirtió que el hecho de que un niño de Tamaulipas haya creado una mochila de seguridad indica que el estado ha fracasado en la protección hacia los menores, “el niño habla de protegerse, de proteger a sus padres, no toma en cuenta a las autoridades”.
Respecto a la participación de la población infantil en el sistema mexicano, dijo que a pesar de que en 2016 todos los estados ya tienen leyes de protección a la infancia, sólo en 14 entidades se establece la obligación de las instituciones para escuchar las opiniones de este sector en los diseños de políticas públicas mientras que 18 estados aún no cuentan con mecanismos de participación, por lo que consideró que actualmente en México la participación de los infantes sólo es de carácter simbólico.
Pérez García, también lamentó que no exista un presupuesto vasto para los Sistemas de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes que están establecidos en la ley general en la materia publicada en 2014 e insistió en que se debe dar la misma importancia a los gobiernos estatales como al federal.
A su vez, Jesús Valencia Guzmán, presidente de la Comisión de la infancia en la Cámara de Diputados, dijo que el sector infantil en México ocupa un tercio de la población nacional, por ello “todos tenemos un interés de que a esta población le vaya bien”.
Aceptó que no se han cumplido con las expectativas con relación al presupuesto que se debe otorgar para el funcionamiento de la ley. “Estamos en deuda los que propusieron y quienes aprobamos el presupuesto”, mencionó el diputado quien además invitó a los congresos estatales a que den más recursos a las procuradurías estatales que brindan protección a los niños.
El legislador añadió que hace unas semanas planteó la iniciativa de reforma de los artículos 34 y 36 constitucionales para que los niños sean ciudadanos desde el momento en que nacen y no hasta que cumplan la mayoría de edad.
Por su parte, Angélica de la Peña Gómez, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado de la República exhortó a reconocer la opinión de los niños, niñas y adolescentes así como su participación, promoción y protección.
“Tenemos que cambiar nuestra forma de ver y reconocerlos como sujetos plenos de derechos desde que son bebés”, subrayó.
Por último, tres niños integrantes del Parlamento Infantil y Juvenil expresaron que quieren vivir mejor, en una ciudad donde no haya inseguridad y en donde se hagan valer todos sus derechos, exigieron que haya más centros de estudio, que se abran espacios en donde se puedan expresar libremente sin temor a la represión.
“Las niñas, los niños, los adolescentes y jóvenes del parlamento, queremos decirles hoy, que a veces la infancia, la adolescencia y las juventudes de México casi no se cuentan, pero cuentan mucho” resaltó Rubén, miembro del parlamento infantil, quien resaltó que a los niños se les pide que sean parte del país y en respuesta, los menores insisten en ser escuchados “si nos ponen atención, lo que queremos es poder vivir tranquilos y seguros”, concluyó.