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Oaxaca, Oax.— “Tenemos un sindicato que está para apoyarnos, pero a quien le tengo que rendir cuentas de mis alumnos, ahora, es a la Federación”, enfatiza el profesor Randolfo Ramiro Sánchez, quien sacó provecho al llamado que hizo la dirigencia magisterial de la Sección 22, de adelantar el calendario del ciclo escolar.
Desde temprana hora, Randolfo llegó a la escuela primaria Basilio Rojas, ubicada en la colonia Centro de la ciudad de Oaxaca, para esperar a sus estudiantes de tercer grado. Apenas y llegaron siete menores, pero el profesor aprovechó para aplicarles un diagnóstico y saber el nivel de aprendizaje con el que llegan.
“Las clases inician el 24, pero nosotros pertenecemos a un sindicato y tenemos que acatar lo que digan, pero no afecta, además que no se les obligó a los padres de familia a que trajeran a sus hijos”, explica.
Al llamado acudieron la mitad de la matrícula, es decir, 180 niños. “Aprovecho para hacer mi evaluación diagnóstico, veo detalles, por eso ahora nos dedicaremos niño por niño para poder nivelar el grupo”.
Ramiro comenta que seguirán con sus manifestaciones, pues pertenece a la CNTE, pero ahora sus marchas serán en las tardes para no suspender las clases.
El maestro asegura que el cambio le quitó el poder a la Sección 22, pero faltó hacerlo a los funcionarios que ganan más de 100 mil pesos “cuando en las escuelas hay carencias”. Sabe que si ahora no rinde académicamente puede ser movido de su grupo “pero por no participar en marchas, ya no. Estoy aquí por un derecho laboral que yo me gané”.
