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Un tribunal federal confirmó la negativa de la prisión domiciliaria a la ex lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Elba Esther Gordillo, dictada por un magistrado federal.

La negativa fue avalada por el Tercer Tribunal Unitario en materia Penal en la Ciudad de México, que tuvo por cumplida la sentencia de amparo en la que se ordenó al magistrado del Primer Tribunal Unitario Penal en la capital a revisar nuevamente la solicitud, y fundar y motivar su resolución.

El pasado 14 de julio el Primer Tribunal Unitario determinó negar la solicitud de Gordillo para que continúe su proceso por lavado de dinero y delincuencia organizada desde su departamento del Club de Golf Bosques de Santa Fe.

En su resolución, el magistrado reconoció que Gordillo es una persona de la tercera edad con diversos padecimientos que la colocan en estado de vulnerabilidad, pero esto no impide que se dé a la fuga, además de que un médico no ha confirmado que no está embarazada.

Indicó que el trato especial que da la Constitución federal al delito de delincuencia organizada está por encima de la salud o la condición de adulto mayor, por lo que el riesgo de fuga es intrínseco a la conducta delictiva que se imputa a Gordillo Morales.

La sentencia fue puesta a consideración del Tercer Tribunal, autoridad que concedió el amparo, para que califique si con ella se tiene por cumplida la resolución del juicio de garantías. A pesar de que la defensa ha calificado estos argumentos como violatorios de derechos humanos, el tribunal los tuvo como válidos y confirmó la negativa.

“Tal ‘razonamiento’ no sólo rebasa en lo absurdo, sino que pone de manifiesto la mala fe del magistrado, cuyo papel es velar por las garantías fundamentales de los ciudadanos”, indicó la defensa.

El abogado Marco Antonio del Toro prepara la presentación de un amparo contra la resolución del magistrado del Primer Tribunal en el que argumentará que estos razonamientos “son absurdos” y afectan integralmente a la maestra.

El sábado pasado Elba Esther Gordillo fue trasladada al Hospital Ángeles del Pedregal para la práctica de un estudio ordenado por los médicos, luego de que un día antes sufrió un desmayo.

Con el estudio se buscó descartar una posible isquemia cerebral provocada por los aneurismas que ha padecido y su defensa consideró que el desmayo “pudo ser consecuencia del estrés al que se le ha sometido” al permanecer recluida por más de cuatro años en un hospital privado y bajo custodia policial.

Elba Esther Gordillo presenta hepatitis viral tipo C, hipertensión arterial sistémica secundaria a la insuficiencia renal que padece, dos aneurismas seculares en el cerebro y sólo tiene un riñón.

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