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El estado de salud del sacerdote José Miguel Machorro Alcalá se encuentra estable, aunque aún permanece intubado, informó la Arquidiócesis de México.
De acuerdo con el último informe médico, el párroco continúa internado en el Hospital Ángeles Mocel, y se recupera de manera paulatina, aunque debido a las broncoscopias que se le practicaron es necesario que permanezca intubado; sin embargo sus funciones renal y cardiovascular siguen siendo “aceptables y estables”.
“Debido al protocolo medico qué hay que seguir después de dos broncoscopias practicadas en las circunstancias tan especiales como son las que estamos viviendo en este caso, es indispensable mantener todavía la intubacion endotraqueal y por ende la sedación total”, destaca.
Machorro Alcalá fue apuñalado el pasado lunes 15 de mayo durante la misa de las seis de la tarde en el Altar Mayor de la Catedral Metropolitana, sufrió una herida en la yugular y otra cerca de los pulmones.
El cura fue atacado por Juan René Silva Martínez, quien en un inicio dijo llamarse John Rock Schild y ser de origen francés, no obstante la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México reveló que el agresor es originario de Matehuala, San Luis Potosí.
Derivado del ataque el sacerdote sufrió un infarto la semana pasada y había desarrollado bradicardia, por lo que presentaba un daño cerebral mayor.
ahc