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El presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, advirtió que el ex gobernador de Veracruz Javier Duarte es un “chivo expiatorio” y al detenerlo se busca “simular que combaten la corrupción”.
En mensaje publicado en su cuenta de Twitter, aseveró que el pueblo no se conformará con esa aprehensión, ocurrida en Guatemala.
El gobernador de Veracruz, el panista Miguel Ángel Yunes Linares, se adjudicó la caída y detención de Duarte; en tanto, los principales liderazgos de oposición demandaron recuperar los recursos desviados.
“Me comprometí a que Duarte sería detenido y se le aplicaría la ley. Hoy está en la cárcel”, dijo Yunes en conferencia de prensa. Afirmó que gracias a sus denuncias Duarte fue arrestado.
El coordinador de los diputados del PAN, Marko Cortés, aseguró que serán vigilantes de que el procedimiento judicial se lleve con total transparencia y con el más alto grado de profesionalismo, a fin de que se conozcan los desvíos de Duarte a las campañas del PRI y de Morena en el pasado proceso electoral.
El vicecoordinador del PRD en la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, aseveró que la detención del ex gobernador y de otros ex gobernadores prófugos es una obligación y no un mérito del gobierno federal, por lo que exigió tener mucho cuidado con pretender utilizarlos como “medallas”.
El diputado Braulio Guerra (PRI) expresó que con la captura no se termina la corrupción en el país; sin embargo, dijo, muestra el compromiso de su partido con la lucha en contra de quienes se sirven del servicio público para sí mismos.
La bancada de Movimiento Ciudadano afirmó que era de esperarse que el gobierno federal celebraría la detención, y exigió una investigación efectiva a “la generación de gobernantes más corrupta de la historia: César y Javier Duarte, Roberto Borge y Rodrigo Medina.
