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La Comisión Nacional de Seguridad (CNS) anunció el fortalecimiento de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Federal y la creación de una área para evitar que se presenten abusos en derechos humanos por parte de sus elementos.

Durante la inauguración del Programa Nacional de Capacitación Policial en Derechos Humanos, el comisionado Renato Sales Heredia se disculpó por el actuar de los elementos en contra de una mujer en Ajuchitlán de Progreso, Guerrero, que se conoció la semana pasada a través de un video, y aseguró que se investiga y se castigará conforme a derecho a los responsables.

“Externo aquí una pública disculpa por esos hechos. Procede, sin duda, pedir perdón por ellos, procede disculparnos públicamente y también procede asumir con responsabilidad las medidas necesarias para lograr que estos hechos no se repitan”, dijo.

La unidad, que será integrada por los comisionados Nacional de Seguridad, del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, y de Asuntos Internos, identificará violaciones a los derechos humanos, dará seguimiento a las quejas y denuncias en contra del personal, capacitará a los elementos, evitará la comisión de delitos y fomentará una vinculación estrecha con la sociedad civil.

“Vamos a implementar básicamente tres medidas para que estos hechos no se repitan. Una de ellas es el fortalecimiento de la Unidad de Asuntos Internos, otro más es vincularnos en un mecanismo de supervisión externa con la sociedad civil, y otro es la creación de un grupo en la comisión formado por los cuatro comisionados y la inspectoría para dar seguimiento a los temas de derechos humanos”, explicó Sales Heredia, titular de la CNS.

Presente en la ceremonia, Roberto Campa Cifrián, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, reconoció que la tortura persiste en “distintos ámbitos” de la cadena de seguridad pública.

Dijo que la tortura no ha permitido mejorar los índices de impunidad y continúa siendo persistente en las instituciones de seguridad del país.

Al hacer mención del video en el que se observa a dos soldados y una policía federal violentando los derechos humanos de un mujer en Guerrero, Campa Cifrián aseguró que existen retos complejos en la seguridad y en los derechos humanos del país.

“Es claro que nos queda mucho por avanzar, así lo reconocemos, existen retos graves y complejos. Tenemos mucho por avanzar, por supuesto en el ámbito de la seguridad en la que ustedes se desempeñan, pero también en los ámbitos de los derechos humanos”.

Aseguró que un Estado democrático se basa en la protección de los derechos humanos de los habitantes. “Me refiero a la necesidad imperiosa de erradicar la práctica de la tortura en cualquiera de sus expresiones. Si bien, la tortura se ha reconocido como una práctica intolerable en cualquier lugar y en cualquier circunstancia, hoy quisiera contextualizarla en el caso de nuestro país y compartirles, muy sinceramente, la convicción que tenemos en el gobierno de la República: ha llegado el momento de terminar con esta práctica, de erradicar la tortura, porque aunque ha habido avances, debemos reconocer que no hemos logrado erradicarla y que su práctica persiste en diferentes ámbitos de la cadena de seguridad pública”.

También asistió el jefe de la Policía Federal, Enrique Galindo, quien anunció la suspensión de tres oficiales que participaron en los hechos registrados en el video, aunque en la grabación sólo se ve a una agente.

“No es cometiendo ilegalidades como se protege a la comunidad”, dijo Galindo tras garantizar que la investigación sobre esos hechos continuará.

Las disculpas del comisionado de Seguridad se unen a las ofrecidas el fin de semana por el jefe de las Fuerzas Armadas, el general Salvador Cienfuegos, en un acto que muchos analistas consideraron sin precedentes.

Los dos militares que también aparecen en el video están arrestados en una prisión militar y Cienfuegos Zepeda dijo el sábado que además de la justicia castrense serán investigadas por su actuación contra un civil.

Los dos agentes fueron suspendidos por la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Federal y puestos a disposición del Ministerio Público junto con la mujer que colocó la bolsa de plástico en la cabeza de la joven.

“Como ustedes escucharon, son tres los que participan y los tres están suspendidos y a disposición [del MP]. Esos tres elementos ingresaron hace más de ocho años a la corporación. Está en manos de la autoridad, hay una averiguación previa, se tomó declaración a la persona afectada”, dijo Galindo.

El titular de la Comisión Nacional de Seguridad instó a los policías a recordar que ellos protegen los derechos humanos, a la seguridad, la integridad física, a la vida, la libertad, la protección de la ley y la presunción de inocencia.

“Los lamentables, agraviantes y dolorosos hechos acontecidos en febrero del año pasado en Ajuchitlán del Progreso, Guerrero, de los que hemos sido todos testigos la semana pasada mediante la transmisión de un video en medios y redes sociales, ofenden a la ciudadanía, deshonran a las instituciones de seguridad, son intolerables y no van a quedar impunes”, afirmó Sales.

En su mensaje refirió que no basta con imputar y sancionar a quien cometió la agresión, ya que la “tortura no es reparable, no lo es para la víctima, no lo es para los policías que renuncian a la obligación de investigar técnica y legalmente el delito, no lo es para sociedad. Estos lamentables hechos deben de ser un parteaguas, un referente para hacer manifiesto el compromiso de nuestras corporaciones para que ese agravio, para que ese dolor, no se repita. Estos actos no deben de empañar la labor de más de 40 mil elementos de la Policía Federal, los más, policías honestos, valientes; policías orgullosos”, aseguró.

(Con información de AP)

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