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Margarita Montaño Soriano, académica del Instituto de Ciencias Forenses, aseguró que un segundo peritaje en el caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, como lo anunció la Procuraduría General de la República (PGR), nunca está de más.

Entrevistada luego de participar en el Primer Congreso de Ciencias Forenses, Montaño Soriano enfatizó que en México hay peritos de excelencia y si lo hacen de una forma documentada, no tiene por qué haber lugar a dudas en su trabajo.

Respecto al informe del grupo de expertos independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la académica mencionó que “las opiniones, mientras mejor documentadas estén, tanto nacionales como internacionales, son importantes y determinantes para poder llegar a un resultado fidedigno”.

Mientras Alejandro Hernández Cárdenas Rodríguez, experto forense que descubrió la técnica de rehidratación de tejidos blandos en cadáveres para su identificación, comentó que de haber cremado a los 43 normalistas de Ayotzinapa en el basurero del municipio de Cocula, Guererro, habrían encontrado los dientes de los jóvenes, pues su material soporta temperaturas muy altas.

“En el basurero no van a encontrar nada. No es posible que 43 cuerpos queden reducidos a nada. Los dientes soportan el fuego, en el basurero tuvieron que encontrar dientes. Ahí había por lo menos 800 dientes, no puede ser posible que no hayan encontrado ninguno”, enfatizó.

Entrevistados por EL UNIVERSAL, el doctor que colabora con la Fiscalía de Chihuahua enfatizó que es imposible que alguien haya podido mantener el fuego a altas temperaturas sin que a lo lejos nadie vea el humo.

Explicó que para cremar un cuerpo se tardan entre seis y ocho horas en un lugar especial; en relación a los normalistas, Cárdenas Rodríguez explicó que tuvieron que apilarlos y luego rociarles algún tipo de acelerador.

“No pudieron haberlos quemado en el basurero, para avivar el fuego en 43 cuerpos es un problema porque el calor impide que alguien se acerque para estar alimentando el fuego. Pero de haberlos cremado, en el lugar se tuvieron que encontrar dientes porque resisten las altas temperaturas”.

El experto forense indicó que en México hay peritos muy buenos que estarían dispuestos a colaborar en las investigaciones.

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