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La Procuraduría General de la República (PGR), permitió el acceso esta tarde a representantes de medios de comunicación, al inmueble en obra negra de donde Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo" Guzmán, se escapó la noche del sábado, luego de que peritos y agentes ministeriales concluyeran los primeros trabajos para determinar la mecánica y modus operandi que siguió el capo para la constucción del tunel y luego abandonar la prisión más segura del país.
El acceso fue para que los propios periodistas nacionales y extranjeros que se han congregado desde el domingo en el lugar, constataran, como señaló el Secretario de Gobernación, Miguel Angel Chong, que era prácticamente imposible “que nadie denunciara nada”, ya que se trata de un lugar solitario en la cima de una pronunciada loma, sin vecinos cercanos y sin acceso a simple vista, ya que hay que bajar una pequeña cañada, subir caminando alrededor de un kilómetro y cruzar un arroyo rodeando el penal previamente, por caminos de terracería sinuosos, angostos y en mal estado.
Fue poco después de las 16:00 horas, cuando se levantaron las restricciones permitiendo a fotógrafos y periodistas ingresar por goteo y tomar impresiones por algunos minutos así como inspeccionar el lugar.
En la bodega de donde salió huyendo el Chapo Guzmán la noche del sábado, se encuentra la obertura de unos 50 por 50 centímetros, por donde fácilmente puede entrar o salir una persona de complexión mediana o incluso robusta, como es el caso del Chapo.
Desde una perspectiva superior, se observa que para fortalecer y contener el túnel, se utilizaron tablas de diversos espesores cortados a medida a fin de evitar que la tierra desbordara sobre la oquedad que se iba formando. También quedaron colgando metros y metros de cables por donde se suministraba la luz, así como una polea –colgando del techo de la bodega- utilizada para cargar y extraer manualmente la tierra que se iba desalojando.
El lugar tapado con láminas de metal también se encuentra ocupado con tablas, polines y otros implementos y herramientas que se utilizaron durante las excavaciones del túnel, así como desechos de tierra, grava y arena e incluso una planta de luz, mediante la cual se suministraba energía a los focos, que como narró el titular de la SEGOB, se fueron destruyendo al paso durante la fuga del Chapo Guzmán, lo que habría dejado a oscuras el sitio y dificultado su persecución una vez que se lanzó la alerta de la evasión.
A un costado de la bodega, se encuentra la construcción que era utilizada como vivienda por los trabajadores, quienes de acuerdo a estimaciones de vecinos, habrían estado laborando durante casi un año en el lugar hasta que completaron la obra.
Desde la obertura es observable también la improvisada escalera de madera que se construyó para que el Chapo Guzmán, procedente del área de regaderas, pudiera subir rápidamente y huir por caminos vecinales localizados entre el penal del Altiplano e instalaciones del Octavo Regimiento.
En el sitio se evidencian rastros de una presencia cotidiana de personas, como trastes, cobijas, ropa que quedo en el lugar, una cama y algunas sillas, todo empolvado, revuelto y sucio.
Cabe destacar que frente a estas dos construcciones, hay una más. Se trata de un terreno de unos mil metros cuadrados y del cual se ha hecho poca referencia, pero que parece una especie de “alberca de arena”, cuyo propósito al parecer era precisamente contener parte de la arena y tierra que se extrajo de la excavación y que ahí se fue acumulando y luego “compactando” al parecer por maquinaria pesada.
A un costado, contrario al de la bodega, se dejó levantada una especie de muro pero con ladrillos sin pegar, simplemente sobrepuestos como pretendiendo tapar la vista hacia el punto en el cual están las instalaciones del Octavo Regimiento Mecánico del Ejército Mexicano.
Este muro de tabiques sobrepuestos es de más de un metro y medio de altura, con lo cual cumple efectivamente su función.
A las afueras también se observa una especie de enorme contenedor de plástico con capacidad para un tinaco, pero que al parecer contenía algún tipo de combustible (posiblemente gasolina o diésel); un tinaco blanco abandonado casi entre la vivienda y la “alberca de arena”; mientras que por la parte externa de la bodega se colocaron telas y un plástico verde grande para producir sombra en la parte exterior.
A lo largo del día representantes de distintos medios de comunicación nacionales y extranjeros se mantuvieron a la expectativa para el levantamiento de las restricciones para entrar al lugar, tal y como prometió durante su conferencia del lunes el titular de la SEGOB