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Con el reconocimiento de que la corrupción política ha invadido los procesos electorales, la presidenta del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), Jacqueline Peschard, informó que junto con los organismos electorales comenzará a trabajar para construir, desde este sistema, el blindaje electoral para 2018.
Los políticos han aprovechado todos los resquicios de la ley para violarla, pues como dice el dicho “quien hace la ley, hace la trampa” y por eso se buscará cómo frenar esas conductas irregulares en las elecciones, expuso.
“Lo que hace el SNA es coordinar y como ha salido a la luz pública la corrupción en la política, por eso sí creemos que es muy importante que en 2018 el sistema esté no sólo viendo distintos procesos que generan actos de corrupción sino que pueda identificar, sancionar y prevenir este tipo de problemas en materia político-electoral.
“La corrupción sistémica ha invadido las elecciones” y se buscará enfrentarla desde el SNA, como coordinador de los esfuerzos, insistió.
“Ya me reuní con el titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE), Santiago Nieto, es un primer pasito”, explicó Peschard.
También en pláticas con el consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, ha expresado su disposición y se buscará al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), pero “queremos complementar con la sociedad civil” e instituciones especializadas, dijo en entrevista tras participar en el seminario “Coahuila, Estado de México, Nayarit, Veracruz: lecciones aprendidas de cara a 2018”, en la UNAM.
En ese seminario el experto electoral y académico Víctor Alarcón Olguín, promotor de ese blindaje electoral vía coordinación del SNA, advirtió que el trasiego de recursos en las elecciones es multimillonario y es un monstruo al que hay que enfrentar.
“Viene un tsunami” si no se enfrenta lo que viene con responsabilidad y desde ahora, planteó. El INE, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la FEPADE y el SNA deben “enfrentar al enemigo común: la compra y coacción del voto, y el clientelismo, vía “supervisar el gasto fiscal 2018 en tiempo real”. De lo contrario la rendición de cuentas “nos va a tomar muy rebasados”.
Los partidos, expuso Alarcón Olguín, son los promotores de la captura del mercado de las clientelas y someten a la corrupción institucional.
La corrupción política y la aplicación de los recursos en las elecciones están vinculados: es la “cleptocracia, el intercambio de recursos por votos”.
Demandó no esperar, sólo con buenos deseos, que el PVEM “se porte bien”, que no haya actos anticipados de campaña, que los funcionarios no hagan campañas o no desvíen recursos, eso es “poner una valla del tamaño de un pony para contener un tsunami”. Lo que se requiere es coordinar esfuerzos desde el SNA, insistió.
