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La titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Rosario Robles, considera una victoria que estando en el gobierno, el partido del presidente Enrique Peña Nieto, el PRI, haya refrendado triunfos en el Estado de México y Coahuila.
En entrevista con EL UNIVERSAL, dice que en México las elecciones son competidas. Destaca que ahora la gente sale a votar, existen procesos electorales confiables y que están en manos de los ciudadanos.
De las impugnaciones a las elecciones, recuerda que cualquiera puede interponerlas y serán los órganos electorales los que decidan.
Rosario Robles Berlanga llega a la cita en un hotel de la Quinta Avenida de Nueva York. Los ojos y gestos delatan que está agotada por las reuniones en las Naciones Unidas. Es el peaje de ser copresidenta del Panel de Alto Nivel encargado de evaluar y mejorar la efectividad del programa de la ONU para los asentamientos urbanos (ONU-Hábitat) tras la adopción de la nueva agenda urbana.
Llega sin haber comido (son casi las tres de la tarde) y pregunta si hay problema por almorzar algo durante la charla. Pide una hamburguesa con queso, pero sin pan, y un refresco de cola. De fondo suena música ambiente con toques de jazz.
Llevan más de un mes y medio trabajando en el documento sobre la implementación de la nueva agenda urbana y el rol del sistema de Naciones Unidas. ¿Tienen ya algunos puntos claros en el borrador?
—Hay puntos importantes sobre la mesa, pero son confidenciales.
¿En qué fase están?
—Estamos en el proceso de dialogar, de tener diversas perspectivas. Todo nos va a ayudar a el 30 de junio (límite establecido para recabar información) tener ya una propuesta más acabada.
México quería incorporar unos puntos claros que quería que estuvieran. ¿Estarán?
—Hemos tenido un papel importante, sobre todo en concretar cómo organizar el sistema de las Naciones Unidas y sus agencias de una manera transversal para darle viabilidad a la nueva agenda urbana: cómo esta nueva agenda urbana se vincula a COP21 y a los objetivos de desarrollo sostenible, quién tiene que asumir este liderazgo dentro del sistema de Naciones Unidas y si la agencia que tenga que asumir este liderazgo tiene que llevar una reforma interna para estar a la altura.
¿México se está capacitando para aplicar todas las propuestas que se van a presentar?
—Estamos trabajando en la implementación de la nueva agenda urbana, en que la ley general tenga sus leyes particulares en cada uno de los estados. Instalamos el Consejo de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano nacional. Estamos trabajando en la estrategia de ordenamiento territorial 2040. Hemos entregado al país y a las diversas ciudades una guía de resiliencia y estamos trabajando en un manual de calles que a finales de julio entregaremos.
¿En qué consiste este manual?
—Recomendaciones de cómo deben ser nuestras calles, pensando en una ciudad incluyente en la que todos podamos vivir y convivir.
Cuando empezó con este trabajo para la ONU también hablamos y no quiso opinar de política interna porque México estaba en pleno proceso electoral. Ya terminó y el PRI ganó por márgenes muy cortos en el Estado de México y Coahuila. ¿Qué opinión le merece?
—La democracia en nuestro país hoy es muy competida. Tenemos una organización que está en manos de los ciudadanos. Ellos organizan los procesos y cuentan los votos. Ya no hay proceso que no tenga competencia y cualquier partido en el gobierno de cualquier signo político enfrenta un reto mayor, debido a que está sometido a un desgaste por la labor de gobierno.
Para mí es un triunfo que, estando en el gobierno, haya refrendado sus triunfos el partido del Presidente.
¿Qué piensa de las acusaciones de irregularidades y del posible recuento de votos?
—Los recuentos los hacen los ciudadanos. Ya se hizo uno en el Estado de México que no cambió el resultado. Todos los partidos tienen el derecho de recurrir a los órganos electorales. Así es como debe realizarse, a través de las instituciones que hemos construido.
Dice que el PRI, por ser partido de gobierno, tiene más dificultad para ganar elecciones y a pesar de eso lo consiguió. ¿La victoria se debe a que no hay una oposición fuerte y a que está muy dispersa?
—No. No es que esté dispersa. Cada partido de oposición representa una ideología y un proyecto diferente.
¿Ve viable algún tipo de coalición en el futuro?
—Eso lo decidirán ellos.
Y si ocurriera, ¿sería competitiva?
—Cualquier elección es competida.
¿El próximo año se plantea ser candidata a la Presidencia?
—No. Siempre sigo la lógica de los alcohólicos anónimos: “Hoy la hice, mañana no sé” (ríe). Día por día.
Con eso no se está descartando.
—Yo estoy en la tarea tan importante que me ha dado el Presidente. Creo que hemos logrado colocar un tema nodal en la agenda nacional, que es el desarrollo urbano de la planeación, recuperar las ciudades como patrimonios públicos. También dejamos huella en la Sedesol con la Cruzada Nacional.
Enumera todo esos temas como si se tratara de anuncios, éxitos para una apoyar una posible futura administración.
—Son éxitos de las áreas en las que me ha tocado participar. Éxitos del presidente Enrique Peña Nieto, porque son de su gobierno.
Si el PRI le planteara ser candidata, ¿lo pensaría? ¿Aceptaría?
—No lo pienso, no es un tema que ahorita a mí me quite en ningún momento de mi preocupación.
¿Tampoco ha pensado quién debería ser el candidato a suceder al presidente Peña Nieto?
—No.
Se habla de los secretarios Miguel Ángel Osorio Chong [Segob] y José Antonio Meade [SHCP].
—Esa es una decisión que deben tomar los partidos políticos.
Sin hablar de ningún nombre. ¿Ve capacidad para tomar el relevo y para suplir la figura del presidente Peña Nieto?
—Eso lo decidirá el PRI.
Una cosa es que lo tenga que decidir el PRI y otra que usted les vea capacidad de liderazgo.
—En el gabinete hay figuras relevantes, pero hablar de alguien podría interpretarse como apoyo, y no.
Por lo que dice, da la sensación que cree que dentro del gabinete hay grandes candidatos potenciales.
—Hay candidatos dentro y fuera.
¿Y usted está entre ellos?
—No me incluyo en nada.
