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Por unanimidad, la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TPEJF) confirmó la validez la designación de Juan Zepeda como el abanderado del PRD al gobierno del Estado de México
En sesión nocturna los magistrados consideraron válida, conforme a la norma del PRD y su derecho de autodeterminación, la decisión de no realizar elección interna para elegir candidato y optar por el método de designación.
Los magistrados resolvieron juicios promovidos por los precandidatos Javier Salinas y Jaime López Pineda. El primero impugnó la decisión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de atraer el proceso de selección y cancelar la elección interna que se realizaría el 5 de marzo, así como el informe de la Comisión Electoral del PRD según el cual existía imposibilidad material para realizar esa votación.
Ese reporte indicó que 883 funcionarios de casilla no estaban afiliados y no se podría realizar otra insaculación, por lo que existía riesgo inminente de quedarse sin candidato.
Por unanimidad la Sala Superior determinó que el CEN del PRD ejerció su facultad, el informe fue sólo un documento empleado por la dirigencia para designar de manera directa la candidatura, lo que es su facultad, y por tanto no se vulneró el derecho de Salinas a ser votado pues si bien se canceló la elección interna, los órganos competentes determinaron aplicar el método de designación directa.
Tampoco se le dio la razón en su petición de sanciones a los integrantes de la Comisión Electoral del PRD.
Tanto Salinas Narváez como López Pineda impugnaron la designación de Zepeda, pero los magistrados desestimaron sus alegatos.
Los juzgadores determinaron que no fue la encuesta la que definió la candidatura pues sólo tuvo carácter indicativo. Lo que determinó la candidatura fue el ejercicio que hizo el CEN de su facultad discrecional.
Al resolver esos recursos quedó firme la designación de Zepeda como abanderado del PRD al gobierno del estado de México.
