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Especialistas agrícolas coincidieron en que la salida de México del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) sería “problemática” para el campo mexicano debido a la dependencia con ese país, no sólo en materia de exportaciones sino de importaciones, aunque impulsaría el crecimiento de los pequeños productores.

Alejandro Díaz Hartz, presidente del Consejo Nacional de Productores de Arroz de México, indicó a EL UNIVERSAL que hay una dependencia hacia los Estados Unidos en los granos básicos, puesto que tan sólo de arroz, 80% de las importaciones proceden de la Unión Americana.

“De salir México del TLCAN sería un golpe para el campo mexicano porque no se tienen las condiciones para abastecer los productos que se importan, lo cual podría afectar a la seguridad alimentaria del país en algunos productos como el arroz”, destacó el líder.

Subrayó que “definitivamente el campo sería de los sectores más afectados si sale México del TLCAN, porque no tenemos las condiciones urgentes para poder abastecer de los productos que tenemos. Pero Estados Unidos también tiene dependencia con nosotros. No somos autosuficientes, porque importamos 80% del arroz que se consume”, enfatizó.

Explicó que México tiene una dependencia de las importaciones en alimentos como el arroz, la soya, las oleaginosas, el maíz amarillo y el frijol, puesto que de este último entre 30 y 35% se compran a EU, nación que es dependiente de hortalizas y la carne, entre otros, por lo que de salir México del TLCAN existiría un “desequilibrio comercial” entre ambos países.

Rubén Vázquez de la Rosa, presidente del Frente Nacional de Productores de Granos Básicos, comentó que existen dos campos mexicanos: El de los grandes agroindustriales y el de los pequeños productores, los cuales se han visto perjudicados a lo largo de los más de 20 años que tiene de vigencia el TLCAN, debido a que se incrementaron las importaciones, por lo que si México sale de este trato comercial “sería contraproducente para las grandes agroempresas, pero puede ser un beneficio para el pequeño productor”.

Aseguró que México cuenta con la suficiente capacidad para abastecer el mercado nacional, sólo requieren de una planeación adecuada y de que se otorguen incentivos a los pequeños productores.

Juan Carlos Anaya Castellanos, director del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), comentó que el sector agroalimentario es estratégico tanto para México como para Estados Unidos, por lo que la posibilidad de salir del TLCAN debe ser abordada “con mesura”, puesto que “con los alimentos no se juega”. Indicó que a estos no se le pueden imponer aranceles muy altos porque incrementarían su precio al consumidor y generaría inflación.

“En el sector agropecuario cuando se genera alguna renegociación o rompimiento nadie gana; la cercanía que tenemos con ellos es muy importante por temas estratégicos de logística, por lo cual desde 1994 firmamos un Tratado de Libre Comercio en el que a ellos les a ido bien y a nosotros nos ha ido bien, tenemos ventajas y desventajas”, subrayó.

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