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El pleno del Senado aprobó elevar la clasificación de delito no grave a grave, con penas de cárcel de uno a 15 años, a la posesión, uso, compra-venta y acopio ilegal de armas de fuego, así como su contrabando.
El tema que apareció como prioritario en la última sesión del periodo ordinario, que no figuraba en los asuntos pendientes de legislar, dio pie a que presenciara la presentación del dictamen y su votación, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, en su calidad de presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
La reforma aprobada por 89 votos a favor y uno en contra, del senador Jorge Luis Preciado Rodríguez (PAN), pasó a la Cámara de Diputados para su revisión en los artículos en que modifica el Código Penal Federal y la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
El objetivo del promovente de la reforma, el perredista Luis Humberto Fernández Fuentes, es abatir la disposición, uso, comercio, contrabando en los casos en que estos objetos no estén permitidos por la autoridad, y quitar estos instrumentos del alcance de la delincuencia común y organizada.
Miguel Ángel Mancera dijo que “la Ciudad de México agradecerá [esta legislación], ya que tendremos mejor forma de actuar para brindar seguridad pública”. Destacó que se trata de una reforma contra el uso ilegal de armas, la delincuencia y sus consecuencias fatales.
Entre los castigos severos, uno corresponde a la portación de armas de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, sin el permiso correspondiente, con penas de seis a 15 años.
Por el acopio de armas, las penas serían de cinco a 10 años, y por las de uso exclusivo del Ejército, de siete a 20 años.
