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El consejero presidente de la Comisión de Presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE), Marco Antonio Baños, aseguró que para 2017 el organismo ya no solicitará más recursos para la construcción de su nueva sede, no habrá aumentos salariales para los consejeros y se prevé que sea una petición presupuestal austera.
“No es un asunto que no tenga llenadera, el INE no está considerando aumentos salariales para los consejeros electorales por ejemplo” y sólo considerará la inflación prevista para el próximo año, dijo al ser cuestionado sobre la solicitud de recursos para 2017, cuando el Fondo para el Cumplimiento del Programa de Infraestructura Inmobiliaria tiene cerca de mil 375 millones de pesos para la edificación de sus 2 nuevas torres.
Recordó que en términos reales el INE propondrá una reducción de gasto de 5 % con relación a lo que ejerce este año, que es de 11 mil 470 millones de pesos de gasto operativo y proyectos especiales.
El consejero electoral reiteró que con la construcción de las torres del INE éste ahorrará casi 80 millones de pesos anuales.
Pero a partir de 2018 podrán verse los primeros ahorros pues empezará a disminuirse el costo de los arrendamientos “y en consecuencia el proceso de recuperación de esta inversión llevará alrededor de 12 o 13 años más o menos pero me parece un plazo razonable para recuperar una inversión de recursos tan importante”, insistió.
jram
