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francisco.resendiz@eluniversal.com.mx
El gobierno de la República rechazó que la primera dama, Angélica Rivera, esté vinculada a un departamento en Miami, Florida, propiedad de la empresa constructora Grupo Pierdant y que éste se encuentre relacionado con algún contrato de la administración del presidente Enrique Peña Nieto o que actualmente participe en un concurso de adjudicación de obra.
Ayer, la Presidencia de la República desmintió al periódico británico The Guardian tras la difusión de información que vincula a la primera dama con un departamento en Florida, el cual supuestamente pertenece a un “potencial” contratista del gobierno federal.
Eduardo Sánchez Hernández, vocero del gobierno de la República, calificó como “falsa” la información del diario londinense y afirmó que “faltó a la verdad” y difundió una especulación “a todas luces dolosa”, por lo que lamentó que el rotativo no verifique la veracidad de la información que emite.
The Guardian publicó que la esposa del presidente Enrique Peña Nieto utiliza un lujoso departamento en Key Biscayne, Miami, propiedad del Grupo Pierdant, que cuenta con alberca, cancha de tenis y mayordomo, el cual está tasado en 2.5 millones de dólares.
El 18 de noviembre de 2014, Angélica Rivera publicó un video de siete minutos en el que da una larga explicación en torno a su capacidad económica y la forma en que acordó con el empresario Juan José Hinojosa la compra de un terreno para la construcción de una casa a su gusto.
Ese día, al detallar la forma en que se hizo de la llamada casa blanca de Las Lomas, Rivera mencionó que desde 2005 es propietaria de un departamento en Miami, ciudad en la que dijo haber vivido durante un año con sus hijas, así como de otro inmueble en La Herradura, el cual compró para su madre en 2007.
El medio de comunicación londinense informó que se trataría de un segundo inmueble propiedad de Angélica Rivera, puesto que ambos departamentos supuestamente comparten el número telefónico y además la correspondencia podía ser enviada a cualquiera de las dos propiedades.
Según la publicación, Grupo Pierdant pagó el impuesto a la propiedad del segundo departamento, además de que Ricardo Pierdant está interesado en las licitaciones de puertos y trenes rápidos de pasajeros en México.
“El nexo entre los dos [Rivera y Perdant] es motivo de preocupación, porque una de las otras empresas del hombre de negocios, Grupo Pierdant, está reportada como uno de los competidores para los contratos del gobierno para desarrollar los puertos marítimos de México”, señaló el diario The Guardian.
El periódico inglés explicó que realizó dos peticiones de información al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, en una de las cuales les dijeron que no había personal para atender su demanda y en otra, que las propiedades de la primera dama son cuestiones de seguridad.
Ayer por la tarde, Eduardo Sánchez Hernández, vocero del gobierno de la República, señaló que la información difundida por el diario es “falsa”, puesto que el medio no presentó la verdad de los hechos.
Afirmó que es falso que dicha propiedad sea el hogar de Angélica Rivera en Florida y al mismo tiempo propiedad “de un contratista potencial del gobierno.
“Ella misma [Angélica Rivera] hizo público que en 2005 adquirió una propiedad, distinta a la que refiere la nota, en el mismo edificio. En la nota se afirma que el señor Ricardo Pierdant es un contratista ‘potencial’ del gobierno, sin ofrecer un solo dato, documento, o declaración que lo sustente. Es una especulación a todas luces dolosa”, señaló Sánchez Hernández.
El vocero del gobierno de la República lamentó que The Guardian “oriente a sus reporteros a predecir el futuro”, más que a confirmar la veracidad de su información.
Hizo notar que Ricardo Pierdant no ha celebrado contratos con el gobierno de la República y tampoco participa en algún proceso que esté en curso.
“La nota refiere que en dos ocasiones solicitaron comentarios en la oficina del Presidente. Cualquier periodista medianamente experimentado sabe que las solicitudes de información de los medios se atienden en mi oficina. Afirmo que nadie estableció contacto, ni conmigo ni con alguno de mis colaboradores sobre este tema”, atajó.
Comentó que en el pasado reciente, The Guardian ha publicado información sobre temas relacionados con México que ha sido desmentida y que, en algún caso, tuvo que ofrecer disculpas a sus lectores, porque no pudo sostener la veracidad de lo publicado. “Siento mucho la falta de profesionalismo de este medio que afecta, sobre todo, a sus lectores”, concluyó Sánchez Hernández.
