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APATZINGÁN, Mich.—El presidente Enrique Peña Nieto visitó, sin aviso y sin el despliegue de fuerzas federales para garantizar su seguridad, una de las comunidades más marginadas de este municipio para convivir con niños, niñas, mujeres y ancianos beneficiados por la Cruzada Nacional contra el Hambre.

Tras inaugurar el Hospital Regional de Apatzingán, el mandatario decidió visitar un comedor comunitario. Entonces, el convoy presidencial realizó un recorrido de más de 20 minutos por brechas y senderos de terracería para detenerse en la comunidad de Chiquihuitillo.

El Presidente de la República utilizó redes sociales para transmitir en vivo una de sus actividades. Esta vez, acompañado por el gobernador Salvador Jara y la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles, mostró a través de internet el recorrido por caminos de terracería para llegar a la comunidad.

Así, acompañado por los secretarios de Salud, Mercedes Juan López; de Desarrollo Social, Rosario Robles, y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jesús Murillo, y del gobernador Jara, se acercó a las personas que estaban en el comedor para preguntarles y conocer su sentir sobre este programa.

Aquí, en esta región de Tierra Caliente —alguna vez bastión del cártel de Los Caballeros Templarios— advirtió que, de acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el país ha registrado durante su administración avances en el acceso a servicios de salud y en garantizar la alimentación diaria de los mexicanos con mayores niveles de carencia. Reconoció a las mujeres y hombres que trabajan sin sueldo para dar de comer a los demás.

Detalló que las cifras del Coneval, en un estudio multidimensional de la pobreza, apuntan que antes una de cada tres personas —de la población objetivo de la Cruzada Nacional contra el Hambre, 7.5 millones de personas— no tenía acceso a servicios de salud y hoy sólo uno de cada 10 no goza de esta atención.

En medio de acciones desplegadas para evitar casos de chikungunya en la región, dijo que otro dato importante de esta evaluación es que de la población objetivo de la cruzada, casi 60% ya superó la carencia alimentaria.

“Es decir, de esa población que no tenía garantizada su alimentación, hoy 57.5% tienen acceso al servicio alimentario”, explicó.

El Presidente convivió con niños y niñas, a quienes preguntaba si visitaban con regularidad el comedor, si estaba rica la comida, el número de integrantes de sus familias y su opinión sobre el programa, comió con ellos los mismos alimentos que tenían servidos. La gente agradeció al mandatario “por los alimentos que nos manda”.

Antes, durante la inauguración del Hospital Regional de Apatzingán, el presidente Peña Nieto dijo que a veces no se da una justa dimensión a cada una de las obras que realiza el gobierno federal y la mejora que éstas aportan a la calidad de vida de la población.

“Pareciera que fueran ya parte de algo ordinario y común el estar entregando obras”. No obstante, enfatizó que este hospital regional significa, “de manera muy importante y relevante”, una mejor atención a la salud de los michoacanos de la zona de Tierra Caliente y agregó: “Para ellos, esta obra tiene un significado relevante, mayor, y un aprecio sin duda lo que una obra como ésta significa para elevar la calidad de vida. Y así lo estamos haciendo en todo el país, obras que van significando cambios para los habitantes de las diferentes regiones de nuestro país”.

Manifestó su convicción de trabajar coordinadamente con el próximo gobernador, Silvano Aureoles y dijo que se trata de obras “emblemáticas” que están permitiendo elevar la calidad de vida de los mexicanos, misión a la que se ha dedicado su gobierno al igual que a impulsar reformas.

“Si bien a veces no se da suficiente aprecio o justa dimensión a lo que se hace, lo importante es saber, antes de obras como ésta, cómo era la calidad de vida y a partir de que se entrega este tipo de obras o se llevan a cabo diferentes acciones, qué tanto va cambiando la calidad de vida de los habitantes de cualquier región del país”, señaló.

Michoacán ha cambiado. El Presidente afirmó que las condiciones del estado son otras tras la implementación del Plan Michoacán. Indicó que el hospital regional es uno de los cinco compromisos del gobierno de la República con el estado en salud.

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