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Un juez de Guatemala resolvió ayer procesar a tres ex funcionarios por homicidio culposo y otros delitos, tras el incendio en un albergue estatal de menores que causó la muerte de 41 niñas y adolescentes. Sin embargo, obtuvieron libertad condicional con arresto domiciliario.
Durante la audiencia de primera declaración, que se prolongó por cuatro días, el juez de Instancia Penal Carlos Guerra encontró suficientes motivos para encausar y dejar en arresto domiciliar al ex titular de la Secretaría de Bienestar Social (SBS) de la presidencia Carlos Rodas, así como a la ex subsecretaria Anahí Keller y a Santos Torres, ex director del Hogar Seguro Virgen de la Asunción, donde ocurrió la tragedia.
También enfrentarán los delitos de incumplimiento de deberes, abuso de autoridad y maltrato contra menores de edad, por el incendio del pasado 8 de marzo.
Guerra argumentó en su resolución final que los tres “abusaron del poder” del que estaban investidos, tienen responsabilidad en los hechos, permitieron el abuso hacia las pequeñas y con su acción “imprudente y negligente” participaron en la tragedia. El juez agregó, por iniciativa propia, el delito de “lesiones graves” por las 15 niñas que sobrevivieron al fuego y que tuvieron diversas heridas, además de amputaciones de sus miembros.
En la audiencia de ayer los familiares de las víctimas presentes en la sala clamaban justicia, mientras el juez dictó libertad condicional con arresto domiciliario para los procesados, previo pago de una fianza de unos 46 mil 600 dólares. Los obligó a acudir cada lunes a la fiscalía y les prohibió tener teléfonos móviles propios, así como comunicarse entre sí o con los testigos del caso. El juez fijó un plazo de seis meses para concluir la investigación.
