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Donald Trump confesó que no esperaba que el trabajo de presidente de Estados Unidos iba a ser tan difícil, y admitió echar de menos su vida de magnate en Nueva York. “Quería mi vida anterior, tenía tantas cosas…” rememoró en una entrevista con Reuters. “Esto es mucho más trabajo que en mi vida anterior. Pensé que iba a ser más fácil”, afirmó.
En otra entrevista con el diario Finantial Times, el reportero que habló con él se percató de que el presidente tiene en la mesa un botón rojo, le preguntó para qué servía. “Todos se ponen un poco nerviosos cuando lo oprimo", señaló Trump, dado que en el imaginario está el botón para lanzar armas nucleares. Sin embargo, el que vio el reportero sólo sirve para llamar a sus asistentes para que le lleven un vaso de Coca-Cola, única bebida que consume.
Entre las cosas que extraña de su vida como multimillonario en Nueva York están conducir y el que si antes no tenía privacidad, ahora es nula. “Estás en tu pequeña burbuja, porque tienes tanta protección que realmente no puedes ir a ningún lado... Me gusta conducir. No puedo hacerlo más”, describió.
Aun así, se dijo satisfecho de sus primeros 100 días de gobierno, que se cumplen hoy. “Vamos terriblemente bien, hemos hecho muchas cosas”, dijo. En otra entrevista, con Fox News, insistió en declarar muerta la Obamacare.
Ayer por la tarde, Trump se dio uno de los baños de masas que tanto le gustan, en la reunión anual de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés). Se convirtió en el primer presidente en participar en esa convención desde Ronald Reagan, ante un grupo que invirtió 14 millones de dólares para ayudarle en las elecciones.
Allí, volvió al clásico discurso de campaña y a sus grandes temas como el muro que quiere construir en la frontera con México. “Construiremos el muro, no importa cuánto baje la cifra [de cruces de migrantes en la frontera] ni cuánto suba. No lo duden”, aseguró a sus seguidores, que lo vitorearon sin cesar.
“Necesitamos ese muro para detener el tráfico de personas, para detener las drogas, para detener a las personas malas”, insistió, no sin reconocer que probablemente no se podrá construir una barrera física a lo largo de toda la frontera, sino en tramos.
Ayer mismo, el jefe de la Patrulla Fronteriza del Sector del Valle del Río Grande, en Texas, Manuel Padilla, dijo que EU reforzará aún más la seguridad en la frontera sur para reducir las amenazas y así combatir problemáticas como el narcotráfico, la migración irregular y el tráfico de personas. Según él, el reforzamiento de la seguridad en California, San Diego y Tijuana ha sido exitoso.
En su discurso ante la ANR, que se realizó en Atlanta, Georgia, Trump dijo a los amantes de las armas: “Tienen un amigo” en la Casa Blanca tras “el asalto de ocho años contra sus derechos”, en referencia a la presidencia del demócrata Barack Obama y prometió defender la Segunda Enmienda. “Como presidente, nunca interferiré en el derecho del pueblo a portar armas”, sentenció. Con información de agencias