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Una mexicana que tiene cuatro hijos nacidos en Estados Unidos enfrentaba ayer la deportación inminente porque una corte federal de apelaciones rehusó bloquear su repatriación.
La Corte de Apelaciones del 6to Circuito, con sede en Cincinnati, aceptó la solicitud del Departamento de Justicia de que desechara la apelación de Maribel Trujillo Díaz.
En su fallo, los tres jueces de un panel dijeron que la solicitud de Trujillo para la intervención de la corte era extemporánea y subrayaron que ella estaba sujeta a orden definitiva de deportación desde 2014. Las autoridades de inmigración afirman que Trujillo entró en el país sin permiso en 2002 y ya agotó sus apelaciones.
“Estamos desilusionados por el fallo de la corte, pero aun así exhortamos al ICE [las siglas en inglés del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos] a que haga lo correcto y no separe a esta mamá de sus hijos”, dijo la abogada Emily Brown, quien recordó que dos de los hijos de Maribel “tienen serios problemas” de salud que “requieren muchos cuidados” y que en 2015 el ICE reconoció que la mexicana era una buena candidata para recibir un permiso temporal de estadía.
Trujillo fue trasladada ayer de Ohio a un centro de detención de inmigrantes en Louisiana a fin de preparar su deportación, agregó.
La Arquidiócesis Católica de Cincinnati pidió clemencia para Trujillo y afirmó que la mujer ha hecho contribuciones positivas a su iglesia y la comunidad en el condado Butler, al norte de Cincinnati.
La familia de Trujillo ha sido blanco de narcotraficantes en México. “Su papá en México fue secuestrado porque las pandillas querían reclutar a su hermano y también lanzaron amenazas contra el resto de la familia”, dijo Brown, citada por el diario La Opinión.
