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Académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) consideraron el discurso de la toma de protesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como demagógico, populista, egocéntrico y excluyente.
En un comunicado, Diana Marenco Sandoval, académica de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), dijo que los discursos de la democracia no sólo reconocen al otro, al pueblo, como interlocutor, sino que lo considera partícipe de los planes, de los proyectos que plantea. El de Trump es unipersonal.
"Es él, el gran señor, quien le regresará 'América' a los 'americanos', aunque se refiere sólo a los WASP (white anglo-saxon protestant). No obstante, los más desprotegidos han sido precisamente los latinos y las minorías que tanto desprecia", señaló.
La suya es una pieza de oratoria profundamente ignorante, carente de información y de bases argumentativas: es, más bien, una declaración de guerra a sus adversarios, agresivo, en donde deja claro quiénes son y a qué se deben atener si no obedecen sus órdenes.
A su vez, Eduardo Rosales Herrera, académico de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, expresó que el discurso de Trump “fue populista al expresar que devolverá el poder al pueblo”.
Al respecto, Iván Alfredo Islas Flores, también de la FCPyS, expuso que el lenguaje utilizado por Trump en su primer discurso como presidente de Estados Unidos fue claro en su estructura, pero con un tono emocional, retórico y con un rasgo muy personal.
Condensó todos los elementos que había expuesto en su campaña, aunque sin ser manejados de una manera tan beligerante. Por el contrario, “estuvieron envueltos en una retórica que selecciona de manera muy atinada las palabras y los elementos para mantener las posturas autoritarias y nacionalistas que ha promovido”.
AE