El primer ministro italiano Paolo Gentiloni estaba en buen estado el miércoles, tras ser hospitalizado por un problema cardiaco a su regreso de una cumbre bilateral en París.
Gentiloni, de 62 años, fue operado el martes por la noche para que le insertaran un stent a una arteria para tratar un bloqueo, dijo el hospital Gemelli, de Roma, en un comunicado. Agregó que la operación fue exitosa.
El primer ministro asumió su cargo el mes pasado tras la renuncia del anterior gobierno. Fungió como ministro de Exteriores de su antecesor, Matteo Renzi.
Gentiloni seguirá hospitalizado y bajo observación por un período no determinado. La reunión que tenía programada para el jueves con su homóloga británica Theresa May fue aplazada, dijo el Palacio Chigi.
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