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El presidente electo de EU, Donald Trump, anunció hoy la necesidad de cancelar una orden para fabricar un nuevo "Air Force One", un Boeing 747 que funge como avión presidencial, que, según dijo, costaría más de 4 mil millones de dólares.
Ante esta declaración, la empresa Boeing señaló que su contrato actual para implementar las especiales medidas de seguridad y equipos sofisticados que requiere la aeronave para dar servicio al presidente, es de 170 millones de dólares y no de 4 mil millones como dijo el magnate.
“Actualmente estamos bajo contrato por $170 millones para ayudar a determinar las capacidades de este complejo avión militar que sirven a los requisitos únicos del Presidente de EU”, señaló la empresa de diseño y fabricación de aviones en un comunicado.
Trump hizo el anuncio en un mensaje por Twitter, y aseguró que los costos ligados al nuevo programa del Air Force One "están fuera de control". "¡Que se cancele la orden!", agregó en su mensaje.
Reafirmó la idea en breves declaraciones a los periodistas en la Torre Trump, en una rara aparición del presidente electo ante los reporteros que hacen guardia en ese lugar desde hace varias semanas.
"El avión está totalmente fuera de control", reiteró, y dijo que el coste es "ridículo". "Queremos que Boeing haga un montón de dinero, pero no tanto", afirmó Trump.
“Esperamos trabajar con la Fuerza Aérea estadounidense en las siguientes fases del programa, permitiéndonos entregar los mejores aviones para el presidente al mejor valor para el contribuyente estadounidense”, dijo la empresa en el comunicado.
Boeing lleva más de medio siglo sirviendo a los presidentes de EU de turno con sus modelos 747 del Air Force One. Ahora, la idea es que el modelo 747-8 reemplace al 747-200 que está actualmente en servicio.
La Presidencia de EU dispone actualmente de dos unidades del 747-200, y la idea es que sean reemplazados por otras dos unidades del 747-8.
Se desconoce si los contratos que se firmaron para la fabricación del nuevo avión presidencial establecen penalidades en caso de que se cancele la orden.
El nuevo modelo, entre otras ventajas, tiene una autonomía de vuelo de mil 600 kilómetros más que el 747-200, y su tamaño es de 76 metros de largo, frente a los 70 metros del modelo actual.
No ha habido aún reacciones de parte de Boeing, pero los títulos de la firma estaban bajando un 0,8 % al comienzo de la sesión de hoy de Wall Street.
*Con información de agencias
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