El ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu, dijo el martes que el fracaso de las potencias occidentales para controlar a islamistas violentos en Siria había retrasado indefinidamente la reanudación de las conversaciones de paz.
Shoigu dijo que rebeldes respaldados por los gobiernos occidentales habían estado atacando a civiles en la ciudad siria de Aleppo a pesar de una pausa en los ataques aéreos rusos y sirios.
"En consecuencia, las perspectivas para el comienzo de un proceso de negociación y el regreso a la vida pacífica en Siria se posponen por un período indefinido", dijo Shoigu.
Rusia apoya al presidente sirio Bashar al-Assad en la guerra civil de Siria y su operación militar en el país, ahora en su segundo año, ha reforzado la posición de Assad. Esto ha propiciado que Moscú choque con Washington y sus aliados, que quieren que Assad salga del cargo.
Desde el 18 de octubre, Rusia y sus aliados sirios dicen que han cesado los ataques aéreos en Alepo. Los gobiernos occidentales alegan que los ataques han causado un gran número de muertos civiles, algo que Moscú niega.
Pero esta pausa en los ataques aéreos contra Aleppo es frágil y el presidente ruso, Vladimir Putin, dijo el mes pasado que su continuación dependía del comportamiento de grupos rebeldes moderados en Alepo y sus partidarios occidentales.
Shoigu, que habló en una reunión con oficiales militares rusos, criticó a los rebeldes y sus partidarios, diciendo que habían desperdiciado una oportunidad para las conversaciones de paz.
"Es hora de que nuestros colegas occidentales decidan contra quién están luchando: los terroristas o Rusia", dijo Shoigu, en declaraciones transmitidas por la televisión rusa. "¿Acaso han olvidado a aquellos bajo cuyas manos murieron inocentes en Bélgica, en Francia, en Egipto y en otros lugares?".
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