Más Información
Guadalupe Taddei solicitará ampliación del presupuesto para la elección judicial a la Cámara de Diputados; “si funciona, estaremos mejor en calidad y resultados"
Sheinbaum es una "consumidora voraz" de información: José Merino; el tablero de seguridad, herramienta clave, destaca
IMSS-Bienestar asegura mantener contratados a 2 mil trabajadores en entidades no adheridas al organismo
Rosa Icela Rodríguez se reúne con próximo titular del INM; “arrancaremos el 2025 con mucho trabajo”, asegura
SSa llama a tomar medidas preventivas ante bajas temperaturas; pide proteger salud por temporada invernal
El denominado "Nobel Alternativo" ha reconocido este año la labor humanitaria en el conflicto sirio, la lucha por los derechos humanos en Rusia, el activismo feminista en Egipto y el periodismo de investigación en Turquía.
La fundación Right Livelihood Award distinguió hoy en Estocolmo a Defensa Civil Siria, cuyos miembros son conocidos como los "cascos blancos" de ese país; la rusa Svetlana Gannushkina; la feminista egipcia Mozn Hassan y el diario opositor turco Cumhuriyet.
Los cuatro galardonados se repartirán de forma equitativa los tres millones de coronas suecas (320 mil euros) con que está dotado este premio, anunció hoy en Estocolmo la fundación, que los escogió entre 125 candidaturas procedentes de 50 países.
El fallo resaltó la "excepcional valentía, sensibilidad y compromiso humanitario para rescatar civiles" en el conflicto que afecta al país de Defensa Civil Siria, grupo creado en 2013 y que en la actualidad cuenta con 3 mil voluntarios de comunidades locales.
Esta organización, que opera sobre todo en las áreas controladas por la oposición siria, ha salvado más de 60.000 vidas, además de ayudar en tareas de reconstrucción de infraestructura pública y en educar a la población sobre medidas de seguridad durante bombardeos.
Más de un centenar de voluntarios han fallecido mientras ayudaban en tareas de rescate, destacó la fundación, que los llama "faro de esperanza en medio de la tragedia humana de la guerra civil siria".
A Svetlana Gannushkina (Moscú, 1942) se la distingue "por sus décadas de compromiso con los derechos humanos y la justicia para los refugiados y migrantes forzados, y por promover la tolerancia entre los diferentes grupos".
Su trabajo ha girado sobre todo en torno al Comité de Asistencia Cívica, organización que fundó y dirige y que ha dado apoyo jurídico gratuito, ayuda humanitaria y educación a más de 50.000 migrantes, refugiados y desplazados internos desde 1990.
Fundadora y directora de la red legal y de migración de la organización Memorial, Gannushkina promovió también enmiendas a la ley sobre refugiados durante su época como miembro del Consejo Presidencial de Derechos Humanos (2002-2012), permitiendo que más de dos millones de personas obtuvieran la ciudadanía rusa.
Gannushkina, cuya organización ha sido considerada "agente extranjero" por las autoridades rusas, se ha involucrado también en la denuncia de violaciones de derechos humanos en zonas en conflicto, sobre todo en el Cáucaso; y recientemente se presentó con el bloque liberal y prooccidental Yabloko en Chechenia.
En el caso de Mozn Hassan y la organización Nazra para estudios feministas, que fundó en 2007, el jurado la ha premiado "por afirmar la igualdad y los derechos de las mujeres en un contexto en el que son objeto de continua violencia, abuso y discriminación".
Hassan ha documentado violaciones de derechos humanos y elaborado respuestas a "la alarmante cantidad de casos de abusos sexuales" contra mujeres en las protestas públicas de los últimos años en Egipto, garantizando además asistencia a las supervivientes.
También se involucró en los grupos que lograron la inclusión de los derechos de las mujeres en la Constitución de 2014 y ha promovido la participación de mujeres en política, además de dirigir una escuela feminista anual.
A Cumhuriyet, el periódico más antiguo de Turquía, se le distingue por ejercer el periodismo de investigación "sin miedo" y por comprometerse con la libertad de expresión "frente a la opresión, la censura, el encarcelamiento y las amenazas de muerte".
El jurado resaltó que se trata de una publicación "firmemente comprometida con la imparcialidad y el interés público", y subrayó que sus trabajadores han sufrido penas de prisión, amenazas y asesinatos por sus artículos en temas de derechos humanos, igualdad de género, laicismo y protección del ambiente.
"En un momento en que la libertad de expresión en Turquía está cada vez más amenazada, Cumhuriyet demuestra que la voz de la democracia no será silenciada", señaló el fallo.
El Premio al Correcto Modo de Vida (Right Livelihood Award), como realmente se llama este galardón que distingue la labor social de personas e instituciones de todo el mundo, fue instituido en 1980 por el escritor y exeurodiputado sueco-alemán Jakob von Uexküll.
lsm