La República Islámica de Irán anunció el fin del uso de su base aérea Noye en Hamadán, en el oeste de Irán, por bombarderos rusos para atacar posiciones de los terroristas en Siria, en apoyo del Gobierno sirio de Bachar al Asad.



El portavoz del Ministerio iraní de Asuntos Exteriores, Bahram Qasemí, en su habitual rueda de prensa semanal dijo hoy que "finalizó el uso de la base de Noye por Rusia", informó la agencia de noticias ISNA.



El uso de la base fue "temporal y con coordinación, y de momento está acabado", reiteró Qasemí y afirmó que "Rusia no tiene base en en el país y no se ha establecido en Irán".



Hoy mismo, el ministro de Defensa iraní, Hosein Dehgán, se quejó de Rusia por haber anunciado que sus aviones salen de una base en Irán y dijo que "detrás del anunció de esta noticia ha habido un tipo de demostración" y que no se esperaba que se anuncie.



Dehgán explicó que "los rusos quieren mostrar que son una potencia y un país influyente y que están presentes en todos los procesos de seguridad de la región y del mundo, y por otra parte están interesados en presentarse como un factor contribuyente en la escena de las operaciones de Siria para poder suministrar en futuro su parte frente a EU".



El ministro subrayó que los rusos pidieron apoyo a Irán "para un tiempo corto y concreto" para las operaciones que llevaban a cabo en territorio de Siria, y agregó: "Nosotros les dimos la posibilidad de despegar y aterrizar y no hubo ningún acuerdo por escrito, sólo fue una colaboración operativa".



El despliegue de los aviones rusos en la base de Hamadán permitía a los bombarderos estratégicos, que anteriormente salían desde el sur de Rusia, reducir en el 60 % el tiempo de vuelo hacia sus objetivos y aumentar su carga de bombas.



Irán ha anunciado que mantiene una cooperación estratégica con Rusia para combatir el terrorismo en Siria y que intercambia capacidades y potencial con acciones en este campo.



Teherán y Moscú son los principales aliados internacionales del presidente sirio, Bachar al Asad, y colaboran para sostener el régimen de Damasco en la guerra civil que golpea el país.



Así, Irán mantiene sobre el terreno a numerosos "asesores militares" que combaten contra los rebeldes de la oposición moderada siria y los grupos yihadistas como Estado Islámico, al tiempo que Rusia mantiene desde septiembre de 2015 una campaña de bombardeos, que ha servido para apuntalar y reforzar al régimen.

jlcg

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