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El grupo Unidades de Protección del Pueblo (YPG, por sus siglas en kurdo), principal milicia kurdosiria, acusó hoy al gobierno de Damasco de atacar sus posiciones en la ciudad nororiental Al Hasaka para "frustrar" su campaña contra el yihadista Estado Islámico (EI) en otras partes del país.
La aviación del gobierno sirio bombardeó hoy por primera vez, desde el inicio del conflicto en el país en 2011, zonas controladas por las fuerzas kurdas en Al Hasaka, según activistas y medios kurdos.
En un comunicado, la milicia señaló que el ataque "se produce en un momento en el que las YPG y las Fuerzas de Siria Democrática (FSD) lograron victorias abrumadoras contra el grupo terrorista Dáesh (acrónimo en árabe del EI) con el fin de debilitar la campaña que llevó a la liberación de Manbech (el pasado fin de semana) y frustrarla".
Consideró que "la escalada" del régimen sirio en Al Hasaka se debe a que el gobierno del presidente sirio, Bashar al Asad, "ve en la derrota del EI su propia derrota (porque) todavía se apoya en la existencia de esta organización para implementar sus planes despreciables".
Además, denunció que decenas de civiles resultaron heridos a causa de los bombardeos aéreos y con artillería pesada contra barrios residenciales de Al Hasaka.
Las YPG aseguraron que se mantendrán firmes para proteger a los habitantes de las zonas que se encuentran bajo su control y castigará a "todas las manos manchadas con la sangre del pueblo con todos los medios a su alcance".
El bombardeo tuvo lugar después de que se registraran choques entre la milicia gubernamental Defensa Nacional y las fuerzas de seguridad kurdas Asayish, que suelen convivir.
Ésta es la primera vez que el ejército sirio emplea la aviación de guerra contra los kurdos, que se encuentran en la primera línea de batalla frente a los yihadistas.
Los kurdos representan el nueve por ciento de los habitantes de Siria y viven sobre todo en la provincia de Al Hasaka, cuya capital es Qameshli, y en las regiones de Afrin y Al Yazira, en Alepo.
bga
