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El oficialismo venezolano y la oposición midieron fuerzas ayer en las calles de Caracas, mientras el presidente Nicolás Maduro anunciaba su decisión de iniciar ejercicios militares de la Fuerza Armada venezolana (FANB) para prepararse ante “cualquier escenario”, tras advertir de supuestos planes de intervención desde el extranjero.
“El próximo sábado he convocado a ejercicios militares nacionales de la Fuerza Armada, del pueblo y las milicias, para prepararnos frente a cualquier escenario, esta tierra es sagrada y debemos hacerla respetar”, dijo el jefe de Estado ante miles de partidarios en una calle del centro de Caracas.
El viernes, el mandatario anunció su decisión de extender y ampliar 120 días el estado de excepción y emergencia económica, lo que le da “el poder suficiente” para, entre otros asuntos, hacer frente a un supuesto golpe de Estado en su contra y probables planes del ex presidente colombiano Álvaro Uribe de una intervención. “Uribe odia a Venezuela, llamó a una intervención armada de un ejército extranjero”, señaló.
“A prepararse para defender la tierra, a nuestros hijos, nuestro derecho a la paz”, pidió ayer Maduro a los partidarios que le escuchaban tras marchar en apoyo a su gobierno.
Asimismo, lanzó una advertencia a los empresarios que denuncian falta de dólares para importar insumos y mantener su producción. Sin nombrarla, aludió a Empresas Polar, la mayor productora de alimentos del país, que paralizó sus plantas de fabricación de cerveza por esa causa.
“Planta parada, planta entregada al pueblo. Ha llegado la hora. Vacilar es perderse. Vamos a hacerlo, a recuperar todas las plantas paralizadas por la burguesía. El que no quiera trabajar, que se vaya y el que quiera actuar, vamos juntos”, dijo Maduro. Empleados de la Polar se mantenían vigilantes, informó El Nacional.
Miles de opositores también marcharon para exigir al Consejo Nacional Electoral (CNE) que se pronuncie sobre la validez o no de 1.8 millones de firmas recolectadas en abril para abrir formalmente un referéndum revocatorio contra Maduro, cuyo mandato debería extenderse hasta 2018. El gobernador del estado de Miranda, Hen-rique Capriles, advirtió que el país es una “bomba que puede estallar en cualquier momento” y dijo que la consulta puede desactivarla.