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Londres.— La organización humanitaria Amnistía Internacional (AI) alertó ayer que miles de inmigrantes y refugiados permanecen “detenidos en condiciones calamitosas” en los campamentos griegos.
Un equipo de Amnistía inspeccionó esta semana los centros para refugiados en las islas griegas de Lesbos y Quíos, donde permanecen “retenidas de forma arbitraria” unas 4 mil 200 personas, según relató la organización en un comunicado emitido desde su sede en Londres.
La mayoría de esos refugiados e inmigrantes llegaron a suelo griego después del 20 de marzo, cuando entró en vigor el acuerdo entre la Unión Europea (UE) y Ankara para devolverlos a Turquía. “En los límites de Europa, los refugiados están atrapados sin luz al final del túnel. Unas instalaciones tan defectuosas, hechas de manera apresurada y mal preparadas son un camino seguro para los errores, para pisotear los derechos y el bienestar de algunas de las personas más vulnerables”, dijo la vicedirectora para Europa de AI, Gauri van Gulik.
“Los detenidos en Lesbos y Quíos no tienen virtualmente acceso a la ayuda legal, tienen acceso limitado a apoyo y servicios, y prácticamente ninguna información sobre su actual situación y su posible destino”, lamentó Van Gulik.
Los internos en los centros de Moria (Lesbos) y Vial (Quíos) entrevistados por Amnistía se quejaron de la baja calidad de la comida que reciben, así como de acceso inadecuado a asistencia médica. La organización humanitaria subraya que esas deficiencias son especialmente graves para los grupos que necesitan cuidados sanitarios específicos. En el centro de Moria hay tres médicos para unas 3 mil 150 personas, según AI, mientras que en Vial el equipo sanitario sufre escasez de medicamentos y equipos especializados.
Diversas madres internadas en los centros se quejaron de que no reciben comida apropiada ni suficiente leche para sus hijos recién nacidos.
La masificación es otro de los problemas que afrontan los refugiados, de acuerdo con la organización humanitaria, que asegura que las instalaciones de Lesbos acogen a tres veces más personas de las que deberían de acuerdo con su diseño. Amnistía indica además que el sistema puesto en marcha por Grecia para recoger las peticiones de asilo “todavía no está funcionando, debido a una falta de recursos y de instrucciones claras”.
En tanto, la agencia de noticias DPA informó ayer que las devoluciones de migrantes desde las islas griegas hacia Turquía podrían retomarse hoy mismo.
En los últimos días unos 600 migrantes escaparon de un centro de detención de la isla de Quíos y mantienen desde entonces ocupado parte del puerto. Otro de los puntos calientes de la crisis de refugiados en Grecia se encuentra en el Pireo, donde se estableció hace semanas un campamento irregular en el que, de acuerdo con las estimaciones, viven unas 5 mil personas.
