Más Información
“México, dispuesto a colaborar”; Sheinbaum responde a propuesta de Marco Rubio para combatir al crimen organizado
Sonora tendrá una armadora del auto Olinia, anuncia Sheinbaum; se instalarán más para aminorar costos de traslado
Detienen en Culiacán a sujetos ligados a “El Perris”; es encargado de la seguridad de “Los Chapitos”, del Cártel del Pacífico
La Policía del estado de Michigan confirmó ayer la detención del autor de una serie de tiroteos la noche del sábado en Kalamazoo en los que han muerto al menos seis personas y dos más han resultado heridas de gravedad, entre ellas una niña de 14 años, en una nueva masacre por armas de fuego en Estados Unidos.
El detenido ha sido identificado como Jason Dalton, de 45 años y conductor del servicio de taxis privados Uber, tras una operación de búsqueda y captura que se completó la madrugada de ayer, informó el teniente de la Policía de Michigan, Dale Hinz. En el momento de su arresto, pasada la medianoche, Dalton no opuso resistencia, y los agentes encontraron más munición y una escopeta en su vehículo.
“No hay duda de que más gente habría muerto si no lo hubiéramos encontrado cuando lo hicimos”, señaló Jeff Getting, fiscal del condado de Kalamazoo, en rueda de prensa.
Los hechos se produjeron a partir de las 18:00 horas del sábado en tres lugares distintos de la localidad, a 220 kilómetros al oeste de Detroit y con 320 mil habitantes.
Entre el primero y el último tiroteo, hubo más de cuatro horas de diferencia. “No hay conexión entre los hechos, todo parece haber sido arbitrario. Es el peor escenario que puede enfrentar cualquier comunidad”, dijo Paul Matyas, subinspector de la Policía del condado de Kalamazoo, en declaraciones al diario local Kalamazoo Gazzette.
El primer tiroteo tuvo lugar en el aparcamiento de un complejo de apartamentos donde una mujer recibió cuatro disparos. La víctima, que resultó herida grave, estaba acompañada de tres niños.
Poco después, dos personas resultaron muertas en un concesionario de venta de vehículos y, luego, el autor de la balacera asesinó a otras cuatro personas que viajaban en dos coches en las cercanías del restaurante Cracker Barrel, a pocas distancia de ahí.
Por el momento, se desconocen los motivos de Dalton para abrir fuego de manera indiscriminada sobre las víctimas, pero Getting aseguró que se había descartado cualquier vínculo terrorista.
Uno de los vecinos, Gary Pardo, aseguró a CNN que el agresor estaba casado y tenía dos hijos, y parecía “una típica familia estadounidense”. “Sé que le gustaban las pistolas”, agregó.
Se espera que hoy sean presentados formalmente los cargos contra Dalton, que no contaba con antecedentes penales.
En la última década se han producido en Estados Unidos más de 200 tiroteos masivos, los que según el FBI han dejado cuatro o más víctimas en promedio en cada incidente.