La Organización Panamericana de la Salud (OPS) estima que habrá unos 2 o 3 millones de casos de zika en Latinoamérica y alerta de que los 100 mil reportados hasta la fecha “no reflejan la magnitud de la situación”, porque muchas personas no van al médico al no tener síntomas o si estos son leves. Las posibles vacunas contra el virus están al menos a 18 meses de iniciar los ensayos a gran escala, advirtió a su vez la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Necesitamos mejores diagnósticos. Brasil ya ha estimado que llegará a tener 1.3 millones y Colombia medio millón”, dijo Marcos Espinal, director del Departamento de Enfermedades Contagiosas de la OPS, en la reunión anual de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia (AAAS), en Wa-shington. El experto basa su estimación de hasta 3 millones de casos en que en 2015 hubo en la región 2.3 millones de casos de dengue y 600 mil de chikungunya, de cuyo contagio es responsable el mismo mosquito que el del zika, el Aedes aegypti.
“No me sorprendería que tengamos dos o tres millones de casos de zika, porque estamos viendo que el mosquito lo transmite con tanta o más eficacia que el chikungunya”, explicó Espinal.
América Latina es la región más afectada por el actual brote de zika: 26 de los 30 países y territorios donde se ha reportado la transmisión local del virus pertenecen a la región.
“Toda la población está en riesgo, porque el virus es nuevo en el continente y, por tanto, nadie tiene inmunidad”, subrayó Espinal.
Por su parte, la subdirectora general para Sistemas Sanitarios e Innovación de la OMS, Marie-Paule Kieny dijo que la respuesta de la agencia de la ONU a la crisis del zika “avanza muy rápidamente” y que hay unas 15 empresas o grupos como posibles participantes en la búsqueda de vacunas.
“Nuestro conocimiento de lo que está actualmente en proyecto nos dice que demorará unos 18 meses antes de que la vacuna pueda aplicarse en un ensayo a gran escala para demostrar su eficacia”, añadió Kieny desde Ginebra.
En tanto, un grupo de científicos británicos halló restos del zika en el semen de un hombre 62 días después de que se le diagnosticara la enfermedad, lo que alerta de que el virus podría permanecer en el fluido más de lo esperado. Ello “podría indicar una potencial transmisión sexual prolongada del virus”, señala el estudio, que elaboraron investigadores de la agencia ejecutiva del Departamento de Salud británico (PHE, por su sigla en inglés), y cuyas conclusiones adelantó ayer la web de la revista Emerging Infectious Diseases.
El primer caso de un bebé con microcefalia vinculada al zika se reportó ayer en Honduras, donde la cifra de infectados con el virus asciende a 11 mil 484.