La Asamblea Nacional (AN, unicameral) de Venezuela declaró ayer “una crisis humanitaria de salud” en el país ocasionada por la escasez de medicamentos, equipos médicos y el deterioro de las instituciones públicas sanitarias.
Con el voto de la mayoría opositora, la Cámara declaró la crisis “en vista de la grave escasez de medicamentos, insumos [materiales] médicos y deterioro de la infraestructura humanitaria”, señaló el acuerdo aprobado ayer durante la sesión ordinaria de la AN.
A través del texto aprobado, el Parlamento acordó “exigir al gobierno nacional garantizar de manera inmediata el acceso a la lista de medicamentos esenciales que son básicos, indispensables e imprescindibles y deben ser accesibles en todo momento”. Asimismo, exigió “el restablecimiento de la publicación del boletín epidemiológico”.
El acuerdo exhorta al Ejecutivo a que “permita el envío de medicamentos de particulares de otras naciones a Venezuela y dentro del territorio nacional”, una posibilidad prohibida por las autoridades.
Solicitó también una serie de reuniones “de carácter público” en el ámbito del Parlamento para “evaluar” los planes a corto y mediano plazos con los que harán frente al sistema de salud. La propuesta fue sometida a votación luego de que se presentaran ante el pleno dos testimonios de personas cuyos familiares murieron por padecimientos de salud que se agravaron, según explicaron, al no conseguir medicina o equipo médico que requerían.
La bancada del oficialismo, conformada por 54 diputados, no votó el acuerdo, defendiendo las políticas públicas de salud del gobierno.
Por su parte, el presidente Nicolás Maduro dijo que tomará acciones legales contra la directiva del Parlamento por haber rechazado el decreto de emergencia que presentó, y señaló que su gobierno se unirá con las empresas privadas para hacer frente a la crisis. “Lo que hizo la Asamblea el jueves fue inconstitucional, así lo digo y me reservo acciones que voy a tomar”, afirmó.
Por la mañana, al menos dos artefactos explosivos caseros detonaron en los alrededores de la Asamblea sin causar daños ni heridos. Un grupo autodenominado Fuerza Bolivariana de Liberación Bolívar Vive (FBL) reivindicó el ataque, diciendo que fue un acto de propaganda contra el “pacto” de Maduro “con la oligarquía”. “No hay salida pacífica a la crisis”, advirtió.