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Un atacante suicida afiliado al grupo Estado Islámico (EI) detonó ayer una bomba en un distrito histórico de Estambul popular entre turistas, dejando 10 muertos —entre ellas ocho alemanes y un peruano— y al menos 15 heridos, informaron funcionarios turcos.
El primer ministro Ahmet Davutoglu informó que el atacante en el distrito de Sultanahmet —la principal zona turística de Estambul— era miembro del grupo islámico y juró luchar contra ellos hasta que ya no “representen una amenaza” ni para Turquía ni para el mundo.
Davutoglu describió al atacante como “nacional extranjero”. El viceprimer ministro Numan Kurtulmus dijo que el agresor era un sirio nacido en 1988, pero la agencia de noticias privada Dogan afirmó que el atacante había nacido en Arabia Saudita. La explosión se produjo cerca de un parque donde se alza un importante obelisco, a unos 25 metros de la histórica Mezquita Azul.
“Turquía no dará ni un paso atrás en su lucha contra Daesh”, dijo Davutoglu refiriéndose al acrónimo en árabe del EI. “Esta organización terrorista, los agresores y todas sus conexiones serán encontrados y recibirán las sanciones que merecen”. Aclaró que la cifra de 10 fallecidos no incluía al atacante suicida.
El gobierno peruano confirmó una víctima mortal de su país, si bien dijo desconocer aún su identidad. “Todavía no tenemos la identidad exacta. La embajada está haciendo todas las averiguaciones. Primero identificaremos y luego avisaremos a los familiares”, dijo la canciller peruana Ana María Sánchez.
La cancillería peruana dijo que además una peruana resultó herida, y la identificó como Daniela Bisan Remawi. La televisora peruana RPP informó que la mujer resultó herida en la pierna, de acuerdo con declaraciones de Carmela Sotomayor, identificada como la mamá. “Mi hija se encontraba, junto a otras dos amistades, cerca del grupo de turistas alemanes, de pronto sintió un fuerte calor en la pierna y reparó en que una de las esquirlas alcanzó parte de su cuerpo. Felizmente salió con vida”, dijo Sotomayor.
Entre los heridos por la explosión habría también seis alemanes y un noruego, indicó la agencia turca de noticias Dogan. Un ciudadano surcoreano sufrió una leve lesión en un dedo.
Por su parte, la agencia oficial de noticias de Turquía dijo que Davutoglu se comunicó vía telefónica con la canciller alemana Angela Merkel para expresar sus condolencias. Merkel calificó el atentado de “acto asesino” y expresó su profundo pesar por la muerte de sus ocho compatriotas. “Hoy le tocó a Estambul, antes a París, Copenhague, Túnez y tantos otros lugares”, dijo la canciller. “El blanco siempre es el mismo: Nuestra vida en libertad y nuestras sociedades libres (...). Los terroristas son enemigos de todos los seres humanos libres, sí, son enemigos de toda humanidad”, enfatizó.
Tanto Alemania como Dinamarca advirtieron a sus ciudadanos evitar muchedumbres fuera de las atracciones turísticas en Estambul. Hoy, el ministro del Interior alemán, Thomas de Maizière, viaja a Turquía para conocer de cerca la situación.
En Estados Unidos, el portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, Ned Price condenó lo que llamó “atroz ataque”. “Estamos con Turquía”, añadió. El presidente de México, Enrique Peña Nieto, tuiteó: “Expresamos nuestra solidaridad con el pueblo turco, en especial, con los familiares y amigos de las víctimas”.