El papa Francisco llegó hoy a la sede de Naciones Unidas para cumplir con una histórica visita oficial, ya que será el primer pontífice que se dirige a un gran número de gobernantes mundiales en la Asamblea General.
Francisco, que se encuentra en Nueva York desde ayer jueves dentro de una visita a EU que antes le ha llevado a Washington y que seguirá mañana sábado en Filadelfia, llegó a la sede central de la ONU a las 8.20 hora local (12.20 GMT).
El pontífice llegó en un vehículo negro y fue recibido por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. Después de los saludos, entró en el edificio principal de Naciones Unidas con una reducida guardia de honor del personal de seguridad de la organización.
Su llegada se produjo poco después de que la bandera del Vaticano se izara por primera vez en la ONU, sin ceremonias especiales, después de que el 10 de septiembre la Asamblea General aprobara un cambio en las normas para poder colocar en su sede las enseñas de los observadores permanentes: El Vaticano y el Estado Palestino.
En la sede de la ONU, el papa tiene previsto reunirse en el vestíbulo del edificio con decenas de miembros del personal de la organización y, posteriormente, con el secretario general de la ONU y otras personalidades.
El acto central de la visita del papa a la sede de la ONU consistirá en un discurso que pronunciará en la Asamblea General, en el preludio de la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible, que reúne durante tres días a unos 150 jefes de Estado y de Gobierno.
cg