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La Habana.— La guerrilla de la FARC no entregará sus armas directamente al gobierno pero sí habrá una verificación de que ya no están en su poder y de que fueron destruidas, dijo ayer a periodistas el Alto Comisionado para la Paz de Colombia, Sergio Jaramillo.
El gobierno de Colombia y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no han podido resolver aún el tema de la entrega de armas del grupo insurgente y la extradición de rebeldes, pese a que suscribieron el miércoles un acuerdo sobre justicia y fijaron un plazo de seis meses para sellar un pacto definitivo que acabe con medio siglo de conflicto.
“Es claro que las FARC no le van a entregar las armas al gobierno, pero se las van a entregar a alguien quien tiene que verificar, demostrar que esas armas fueron destruidas y que no están en poder de las FARC”, dijo Jaramillo en La Habana, donde se realizan las negociaciones.
El presidente Juan Manuel Santos y las FARC acordaron el miércoles la creación de un tribunal especial para juzgar a los culpables de crímenes de guerra que participaron del conflicto, pero quedó abierta la cuestión de la extradición. “Las condiciones para la extradición las establecerá el acuerdo final, pero (...) nadie participa en un proceso de paz, se suscribe a un acuerdo, para terminar extraditado”, dijo Jaramillo, quien acotó que “también es obvio que van a tener que cumplir algunas condiciones, con unas reglas de juego. Y eso es lo que va a contener el acuerdo final”.
Una vez que se concrete la firma del acuerdo final, prevista para el 23 de marzo de 2016, el grupo rebelde, considerado terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, dejará las armas a más tardar 60 días después.
La fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Fatou Bensouda, saludó el acuerdo entre Santos y las FARC, pero aclaró que su despacho lo “revisará en detalle y analizará cuidadosamente”. Bensouda se ha manifestado a favor de castigar a los responsables de delitos graves en Colombia.
Diversas instituciones expresaron su beneplácito por el acuerdo. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo que el pacto “fortalece la esperanza de todo el continente americano de ver a Colombia en paz”.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, consideró que es un “progreso significativo para alcanzar un acuerdo final de paz”. Agencias