El presidente de Burkina Faso, Michel Kafando, que fue retenido por militares que dieron un golpe de Estado contra el gobierno del país la pasada semana, aseguró que ocupa de nuevo su cargo y que "la transición está de vuelta".
"La transición está de vuelta y retoma en este mismo momento el ejercicio del poder del Estado", declaró Kafando en un acto en memoria de las víctimas de las protestas registradas estos días en el país en contra del golpe proclamado el pasado jueves.
Kafando confirmaba así, poco antes del acto solemne de su restitución en el poder, que "con libertad ya de movimiento", retomaba sus funciones "en virtud de la legitimidad nacional".
El presidente celebró el "clamor nacional" y la "reprobación internacional" contra los golpistas y en apoyo del Ejecutivo elegido para dirigir la nación hasta las elecciones, que inicialmente estaban previstas para el 11 de octubre.
"El gobierno de transición que habéis elegido libremente y en el que habéis depositado vuestra confianza sigue siendo el único que encarna la voluntad del pueblo", aseveró el mandatario.
No obstante, llamó al pueblo burkinés a "seguir la movilización en torno a la transición para continuar lo que comenzamos, para volver a encaminar el proceso electoral".
También quiso honrar "la memoria de aquellos que han caído por la defensa de la patria", en referencia a las víctimas de las protestas en contra de los sublevados, en las que han muerto al menos diez personas y cerca de un centenar han resultado heridas.
Kafando será restituido hoy en el poder en una ceremonia a la que asistirá una misión de presidentes de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), para garantizar que el Gobierno de la transición es restaurado.
El anuncio de la vuelta de Kafando al poder llega solo horas después de que el Ejército y los militares golpistas alcanzaran un acuerdo por el que se confinará a la guardia presidencial en su cuartel general en la capital y se garantizará la seguridad de sus soldados.
La CEDEAO, que celebró ayer una cumbre extraordinaria en Abuya (Nigeria) sobre la crisis, ha intentado encontrar una solución de compromiso para devolver el poder a las autoridades civiles con tiempo suficiente para celebrar las elecciones presidenciales con la fecha límite del 22 de noviembre, un mes y medio más tarde de lo previsto.
La amnistía a los golpistas y la disolución de la guardia presidencial han sido los principales puntos de desacuerdo en las negociaciones, ya que las autoridades transitorias consideran que los militares sublevados no deben salir impunes
Kafando, tras ser liberado por los golpistas, se refugió el lunes en la residencia del embajador de Francia, mientras que su primer ministro, Isaac Zida, volvió a su cargo oficial este martes, según anuncio él mismo.
Kafando, el primer ministro, Yacouba Isaac Zida, y el resto del Ejecutivo fueron secuestrados el 16 de septiembre por miembros del Regimiento de Seguridad Presidencial (RSP) liderados por el general Gilbert Diendéré.
El golpe de Estado, el sexto la historia de Burkina desde que consiguiera su independencia en 1960, ha intentado sabotear la transición democrática en este país africano, que en noviembre del pasado año motivó la caída del expresidente Blaise Compaoré tras 27 años de mandato.
(Con información de Notimex)
jlc