Washington.— El secretario estadounidense de Estado, John Kerry, recibirá este lunes al canciller cubano, Bruno Rodríguez, en la primera vez que un ministro de Exteriores de Cuba visita el Departamento de Estado en más de medio siglo, confirmó ayer el gobierno de Estados Unidos.
Kerry no asistirá a la ceremonia formal de reapertura de la embajada cubana en Washington el lunes, pero sí recibirá después a Rodríguez en el Departamento de Estado y ambos darán una conferencia de prensa tras el encuentro, indicó el portavoz de la diplomacia estadounidense, John Kirby.
La bandera cubana se izará en su misión en Washington por primera vez en 54 años. Si bien la embajada de EU en La Habana también será reabierta automáticamente, la bandera de EU no será izada hasta que Kerry visite la isla para presidir la ceremonia, dijeron ayer funcionarios estadounidenses. Se espera que Kerry viaje a Cuba en agosto.
El gobierno cubano adelantó el jueves que Rodríguez se reuniría con Kerry en el Departamento de Estado el lunes, el mismo día en que EU y Cuba restablecerán formalmente sus relaciones diplomáticas, rotas desde 1961. Antes de la ceremonia de reapartura de embajada, la bandera cubana será colocada en la recepción del Departamento de Estado para unirse a las de otros países con los cuales EU tiene relaciones diplomáticas, señaló ayer la dependencia.
Según Kirby, Kerry y Rodríguez sostendrán una “conversación sustancial” en su reunión, la segunda que mantienen desde el anuncio sobre el acercamiento bilateral que tuvo lugar el 17 de diciembre. Su primer encuentro se produjo en Panamá en vísperas de la Cumbre de las Américas en abril, y marcó la reunión de más alto nivel entre los gobiernos de ambos países desde 1958.
La cita de este lunes en el Departamento de Estado “será mucho más que un apretón de manos y una foto”, e incluirá “una conversación significativa” sobre los recién estrenados lazos, aseguró Kirby.
Entre los asuntos pendientes en la relación, desde la perspectiva estadounidense, están “las conversaciones sobre el acceso a las telecomunicaciones, sobre asuntos de salud” y sobre migración, además del “diálogo sobre derechos humanos”, agregó el portavoz, quien reconoció que Cuba aún es un país restrictivo, pero señaló que EU tiene lazos completos con otras naciones similares y que los diplomáticos estadounidenses pueden trabajar ahí.
“No es un ambiente libre de restricciones, pero estamos seguros que podrán hacer el trabajo que necesitan hacer”, dijo. Agencias