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emilio.fernandez@eluniversal.com.mx
Ecatepec, Méx.— Pasajeros de una unidad de transporte público estuvieron a punto de linchar a un ladrón, quien armado con un picahielos intentó despojarlos de sus pertenencias; tuvo que ser rescatado por elementos de la Policía Municipal de Ecatepec.
El automotor circulaba sobre la carretera libre México-Pachuca, con dirección hacia la Ciudad de México, cuando fue abordado por un hombre a la altura de la comunidad de Venta de Carpio y simuló ser un pasajero.
Luego de que el vehículo avanzó unos metros, el sujeto de aproximadamente 25 a 30 años de edad, se levantó de su asiento y sacó un picahielos. Con amenazas e insultos exigió a los usuarios entregar sus pertenencias.
Mientras le quitaba su dinero a algunos de los pasajeros, otros aprovecharon para someterlo y le quitaron el picahielos. Lo empezaron a golpear aún con el camión en movimiento.
El operador se dio cuenta de lo que ocurría y entonces se detuvo a la altura de la estación Central de Abastos del Mexibús, donde bajaron al sujeto.
Cuando estuvieron sobre la banqueta, los usuarios continuaron golpeando al delincuente. Algunos transeúntes que se percataron de lo que sucedía se unieron al castigo ciudadano.
Momentos después llegaron al sitio miembros de la Policía Municipal para evitar que le siguieran haciendo daño los molestos usuarios y habitantes.
Los oficiales lo subieron a una patrulla y lo trasladaron ante el Ministerio Público.
Celular salva la vida a policía de Neza. Un policía de Nezahualcóyotl sobrevivió al impacto de bala, la cual quedó incrustada en su teléfono celular, luego de que un grupo de delincuentes intentaran cometer un atraco a pasajeros del transporte público.
Jorge Amador, director de la corporación, contó que el oficial Miguel “N”, con 17 años de servicio, despojó de su arma a uno de los ladrones, que en complicidad con otros, pretendía despojar de sus pertenencias a usuarios de una combi que iba de Periférico a Ciudad Azteca. Les quitó el arma y empujó fuera de la unidad, pero la pistola se disparó. Usuarios se acercaron para tratar de auxiliarlo y al revisarlo se dieron cuenta que en su celular, que traía en el pecho, quedó incrustada la bala.
