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Como suelo minado, oscuras e inseguras operan las zonas industriales de Cuamatla y Xhala, donde operan y laboran en situación de alto riesgo 500 empresas.
Ramón de la Peña Flores, gerente regional de la Unión Industrial del Estado de México (UNIDEM), señaló el grave deterioro de carpeta asfáltica desde hace más de seis años, inundaciones, falta de alumbrado público e inseguridad.
Por ello los empresarios pidieron a las autoridades municipales de los dos trienios anteriores 2009-20012 y del 2013–2015, sin embargo no fueron escuchados.
Calles como Antonio Lavoisier, Guillermo González Camarena, James Watt, Ballena, Barracuda y Delfín, en Cuamatla, y; Carreteros y Carpinteros en Xhala, son solo algunas de las que presentan mayor deterioro por falta de atención de los dos últimos gobiernos municipales.
“La principal demanda de los industriales de Izcalli es que se atienda el grave deterioro del pavimento, pues afecta la operación de entradas y salidas de los transportes de carga, además de que vuelve peligrosas las zonas industriales para los empleados. Ya hemos tenido tres reuniones con autoridades municipales para realizar un trabajo conjunto y poder atender estas problemáticas”, dijo De la Peña.
En alumbrado, cerca del 70 por ciento de las lámparas de ambas zonas industriales se encuentran apagadas, por lo que son sitios de riesgo para los trabajadores, en especial para las mujeres, pues un gran número de empresas cuenta en su mayoría con plantilla laboral femenina.
“La mayoría de las fábricas detiene sus actividades a las 7 de la noche, principalmente en aquellas empresas utilizan mano de obra femenina, y se enfrentan a asaltos y riesgos al salir de sus centros de trabajo”, denunció el representante empresarial.
En algunas zonas los baches se han convertido en hoyos de hasta un metro de profundidad, lo que complica la circulación de autos, camiones, trailers y tractocamiones que se han quedado atorados, y afecta la operación de las empresas, además de ser un factor que contribuye con la inseguridad de la zona.
El año pasado en Antonio Lavoiser la inundación alcanzó 1.5 metros de altura y afectó a empresas como Body Care, Tumosa y Panadería Don Toño.
La UNIDEM ha sostenido varios acercamientos con autoridades locales y espera reunirse con el presidente municipal Víctor Estrada para emprender planes de trabajo en conjunto que permitan atender de manera urgente las problemáticas de las zonas industriales, con la colaboración de los propios empresarios y apoyo de autoridades estatales.
Mientras que en el tema de inseguridad, la unión industrial buscará que se pongan en marcha cinturones de seguridad en coordinación con la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana para reducir la incidencia delictiva entorno a las zonas industriales, especialmente a la hora de salida de los trabajadores.
afcl