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La gente que esperó al papa Francisco desde las tres de la tarde en la esquina de Fray Servando y Circuito Interior comenzó a retirarse tras el paso del pontífice.
Al momento en que el papamovil circulaba por la zona, empleados de un restaurante lanzaron fuegos artificiales mientras la gente gritaba de emoción.
Sin embargo, algunas personas no se fueron tan satisfechas al considerar que la valla policía fue excesiva, por lo que no pudieron ver el papamovil con Francisco abordo.
Llorando, la señora Guadalupe Ríos se quejó, ya que a pesar de que estuvo de guardia desde las tres de la tarde no pudo ver al máximo jerarca de la Iglesia Católica.
