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diana.fuentes@eluniversal.com.mx
La reforma política del Distrito Federal no estaría muerta en caso de que no sea aprobada este jueves en la Cámara de Diputados, aseguró el presidente de la Comisión Especial de la Reforma Política de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), José Encarnación Alfaro.
Dijo que en caso de que el dictamen no sea avalado, sólo se estaría retrasando algunos meses; no obstante, se dijo confiado de que la Junta de Coordinación Política la suba y el pleno la apruebe.
Hoy, cuando comparece el titular de la Coordinación General para la Reforma Política del DF, Porfirio Muñoz Ledo, ante el pleno de la ALDF, el vicecoordinador del PRD, Raúl Flores consideró que de aprobarse la capital del país ya no sería excluida.
Reiteró la importancia de conformar un Congreso Constituyente en donde se dé una discusión libre y comprometida con los capitalinos.
Sobre el tema, el diputado local Víctor Hugo Romo detalló que se integraría la ciudad de México como Constituyente al Pacto Federal, y tendría un régimen de competencias idéntico al de los estados, con la creación de alcaldías como órganos político-administrativos conformados por una figura idéntica al presidente municipal y por un consejo, cuyos integrantes sean electos por votación en lugar de la figura de delegados.
“Los habitantes merecemos un trato de primera y el Distrito Federal merece tener el mismo estatus que cualquier estado de la República. Con la reforma política se amplían las libertades de los capitalinos”, dijo.
Mencionó que aunque fuera aprobada este año, el dictamen prevé la conformación en 2016 de un órgano legislativo temporal para la redacción de la primera Constitución para la ciudad de México.
Entre los avances fundamentales el perredista destacó que se suprimirían las facultades del presidente de la República para conceder el indulto a reos sentenciados por delitos del orden común en la capital del país.
“En síntesis, la reforma política es una homologación del Distrito Federal con las entidades federativas y desde luego establece la incorporación de nuevos derechos, facultades, prerrogativas y obligaciones para la ciudad de México”, agregó.
La diputada de Morena Aleida Alavez criticó la nula participación de la Asamblea: “Será un Congreso Constituyente en donde se impondrá a 60% de representantes, del cual sólo 40% será electo; es decir, será una reforma a modo de la clase política”.
El coordinador de Acción Nacional en la ALDF, Jorge Romero, sostuvo que entre los logros está la autonomía real presupuestal de las delegaciones que se convertirán en alcaldías: “La reforma política pasará a la historia y abundará en la democracia que ya tiene la capital del país”.
