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En la antesala del proceso para reelegirse por tercera ocasión como presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Edgar Elías Azar se ve contrariado por la forma en que un sector del pleno de magistrados busca romper sus aspiraciones.
Ante argumentos como que busca “entronizarse” en el poder judicial responde: “que se inscriban a la contienda y que convenzan al pleno de los magistrados, pero que no lastimen a la institución con falsos testimonios”.
También rechaza que tenga el control del pleno, pero explica que para tomar la decisión de contender por un nuevo periodo escuchó a 61 magistrados que le dijeron que sí cumplía con los requisitos de ley.
En su plática con EL UNIVERSAL, el presidente del TSJDF habla de los avances que tuvo el poder judicial durante su administración, como la implementación de los juicios orales y de los errores que se han cometido, como invertir en Ficrea y perder alrededor de 100 millones de pesos.
“Ficrea es un disco que se vuelve a dar y a dar, el tema de ese dinero está regulado y hay un artículo en el que nos obliga a colocar el dinero con la más alta tasa de interés, si nosotros no ponemos el dinero en la tasa más alta de interés recibimos señalamientos de la Contaduría Mayor.
“La decisión de invertir en Ficrea no fue mía, la decisión fue del Consejo de la Judicatura, que es el que administra el fondo. El Consejo de la Judicatura se reúne, los siete magistrados nos reunimos, se le pregunta al secretario técnico: dime cuál es la tasa de interés más alta que hay en el mercado, y él proyecta en la pantalla las más altas tasas de intereses de las financieras reguladas por el gobierno”, precisa.
—La pregunta es: ¿Ya se perdieron los 100 millones?
—No se han perdido.
—¿Ya los recuperaron?
—Tampoco eso. Pero están en los activos que ya se intervinieron, ya se promovió la quiebra y van a tener que empezar a repartir activos, a mucha gente ya le pagaron, yo creo que quedamos por ahí de 20% de los ahorradores.
—¿Van recuperar el monto total?
—Yo no tengo duda de que se va a recuperar, pues ahí están los inmuebles y los carros y las cuentas por cobrar, se tienen muchos activos y cada vez menos acreedores. Yo estoy seguro, yo no tengo ninguna desconfianza de que vamos a cobrar. La decisión de Ficrea fue del Consejo de la Judicatura.
—¿Jugaron a la especulación?
—No, tampoco, no estamos especulando. Tenemos que dejar en claro que la ley nos obliga a poner el dinero en la más alta tasa de interés. Ahora con esto ya no lo dejamos en la más alta tasa de interés y no tengo duda que la Contaduría Mayor de Hacienda, el año que entra, me va a hacer el señalamiento.
El proceso para elegir al nuevo presidente del Tribunal está en puerta; el próximo 12 de octubre se realizará una sesión privada en la que se definirá cuántos magistrados competirán y a la fecha se comenta que hay 12 aspirantes. El 19 de octubre, también en sesión privada, los candidatos presentarán su proyecto ante el pleno y el 4 de noviembre se realizará la elección.
Edgar Elías Azar busca mantenerse en el cargo por otro periodo, que de lograrlo sería el más largo en la propia historia del poder judicial de la capital del país. Los jaloneos y filtraciones que se han dado alrededor le preocupan.
—Hay un grupo de magistrados que no quieren que se reelija.
—El disenso es bueno. A mí no me gustaría llegar a una contienda con ningún opositor. Yo no quiero ir solo.
—Hay quienes dicen que es una obsesión de su parte por mantenerse al frente del Tribunal. ¿Es así?
—Yo les diría que sí estoy obsesionado. Pero le voy a explicar en qué estoy obsesionado. Yo hace más de 40 años que caminé por primera vez en el Tribunal Superior y desde entonces fue para mí una obsesión darle una independencia al Tribunal Superior, que no han conseguido los tribunales del país. Efectivamente me obsesioné con dar un fondo de retiro a los magistrados, que tuvieran un retiro adecuado y generoso. Ya se lo dimos.
—Lo acusan de tener control del pleno a través de la entrega de recursos.
—Nada hombre, nada de eso. Eso es ofender a nuestros compañeros magistrados. ¿Usted cree que un magistrado que tiene 30 años de ser juez se va a dejar mover sus sentimientos, su decisión por dinero? Bueno en ese momento yo dejo mi toga y la quemo, si un magistrado se deja convencer por eso. La quemo en medio del Tribunal Superior, es muy ofensivo para el resto de los magistrados que digan eso.