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En proceso de construcción se encuentran cuatro planteles del Instituto de Educación Media Superior (IEMS) del Distrito Federal, afectando a miles de estudiantes que iniciaron el ciclo escolar 2015-2016.

El pasado jueves, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Perla Gómez Gallardo, presentó una recomendación sobre este tema a la Secretaría de Educación local y al IEMS, además solicitó que la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) dote a estas instituciones de suficientes recursos en la partida presupuestal en 2016.

Tras este anuncio, EL UNIVERSAL realizó un recorrido por los cuatro centros educativos para identificar cuáles son las necesidades de éstos y ver porqué no han sido entregadas las instalaciones.

Los centros visitados fueron Álvaro Obregón 2, Iztapalapa 3, Iztapalapa 4 y Venustiano Carranza, los cuales —al estar inconclusos— han tenido que adecuarse para dar clases en espacios alternos como parques, banquetas y comedores comunitarios.

En este ejercicio se entrevistó a los profesores de las instituciones, así como a los alumnos que todos los días padecen los estragos por obras que el gobierno dejó en el abandono.

El plantel Iztapalapa 3, localizado en la colonia Miravalle, se logró gracias a una lucha por parte de los colonos que duró cerca de 12 años, para que ahora sus hijos lo disfrutaran; sin embargo, aunque ellos avanzan en sus estudios, las condiciones no son las óptimas.

“Fueron muchos años de lucha, pidiendo que aquí nos hicieran una preparatoria para el cuadrante de Santa Catarina, ahora hay que pelear para que concluya”, dijo una ex alumna.

Al no tener condiciones adecuadas dentro del predio, los profesores han tenido que adaptarse en la calle para impartir sus conocimientos.

“Este edificio se ha creado a partir de la lucha de la población en la colonia Miravalle, desde que estuvo este inmueble han venido a inaugurarlo tres personas, uno de ellos es Mario Delgado, cuando quería ser jefe de gobierno; pero sólo llegan, se alzan el cuello y hacen promesas, pero no cumplen”, indicó Luis Alejandro Cardona, profesor de la institución.

Otros que tuvieron que adecuarse a las condiciones fueron los estudiantes del plantel Iztapalapa 4, que al necesitar una escuela se acomodaron en aulas temporales, donde duraron más de cinco años y surgió una generación de especialistas en robótica.

La CDHDF determinó que la plantilla docente es insuficiente, aunque los profesores consideran que con el paso del tiempo mejorará la institución y se podrá duplicar la matrícula, la plantilla de docentes y administrativos.

Cambian de sede. Durante ocho años, los estudiantes del plantel José Revueltas permanecieron en los llamados gallineros, atrás de la delegación Venustiano Carranza, soportando calor, frío e inestabilidad por saber cómo concluirían sus estudios; “nos daba miedo porque nadie nos decía qué pasaría, decían que era una preparatoria hechiza, que iba a desaparecer, pero este año nos dijeron que nos cambiaríamos y ahora estamos más estables”, comentó un estudiante.

En la actualidad, los jóvenes estudian en un edificio que se construirá frente a la Cámara de Diputados.

Sin terminar. Aunque los trabajos de construcción en las instalaciones del plantel Vasco de Quiroga, en la delegación Álvaro Obregón, fueron completados, hasta la fecha no han sido entregados, indicaron trabajadores del centro de estudios; según la CDHDF, el plantel no cuenta con el mobiliario y materiales necesarios, además no tiene áreas deportivas, aún así inició el periodo escolar 2015-2016.

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