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La intensa lluvia combinada con el granizo que empezó a registrarse desde la tarde del domingo, provocaron un deslave a la altura del kilómetro 29 de la autopista México-Toluca con dirección hacia el Distrito Federal, que según las autoridades de Protección Civil, no dejó lesionados pero sí una fila que superó los cuatro kilómetros de largo de autos que se quedaron atorados en este punto, pues no avanzaron hasta que retiraron la tierra de la carretera.
Según un comunicado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, esta dependencia ya trabaja en coordinación con la Secretaría de Gobernación para atender la emergencia. Al lugar, se han movilizado personal y equipo, agrega.
Según el reporte de las autoridades, el deslave ocurrió poco después de las 22:00 horas cuando los conductores que se empezaron a percatar del problema, reportaron el siniestro a los teléfonos de emergencia, por lo que de inmediato iniciaron las labores en la zona y se desviaron los autos hacia la carretera libre, metros antes de llegar a la Marquesa.
De igual manera, explicaron que la complicación vehicular es solamente para ingresar al Distrito Federal, pues rumbo hacia el Estado de México la situación de transito es normal, sin embargo, para evitar una complicación mayor elementos de la Policía Federal están patrullando la zona y orientando a los guiadores sobre lo sucedido.
Protección Civil estima que a más tardar a la media noche, el tramo dañado quedará liberado para no afectar a todos aquellas personas que tienen que usar la carretera para negocios, trabajo e incluso los camiones que transportan mercancía perecedera, reportando que el deslave no fue grave, aunque se mantienen alerta por si la lluvia se intensifica en las siguientes horas.
