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En la Ciudad de México sí se ha incrementado la incidencia en delitos como robo a transeúnte, homicidio y robo con violencia, reconoce el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, pero explica que se debe a la laxitud del nuevo sistema de justicia penal que es hipergarantista, que además pone a la víctima en la disyuntiva de volver a enfrentarse al presunto delincuente para que pueda quedar en la cárcel.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el mandatario capitalino asegura que por esta situación alrededor de 15 mil personas que deberían estar en prisión andarán en las calles, “lo que lógicamente te impacta en la curva de incidencia delictiva”.
Por ello plantea una reforma a este nuevo sistema de justicia, que asegura ha sido criticado por los 31 mandatarios estatales, quienes incluso han presentado sus propuestas de reforma al interior de la Comisión Nacional de Gobernadores (Conago), debido a que les está impactando en el tema de la seguridad pública.
Cuando se le pregunta de los delitos que reconoce se han incrementado, de inmediato trata de buscarle una explicación, como el caso de los homicidios dolosos de los que dice que 70% han ocurrido en riña o en el asunto del robo a casa habitación, los que asegura que se dan por la colusión del personal de seguridad con los presuntos delincuentes.
“¿Quiénes son los que están robando, cuántas bandas hemos capturado ya, dónde están robando?, pues en los condominios donde hay seguridad privada; ¿qué quiere decir?, que tu seguridad privada no es seguridad privada, sino un invento o que estas bandas también encuentran esta facilidad de estarse reproduciendo”, precisa.
Sobre la información que dio a conocer el Consejo Ciudadano, relativo al incremento de la incidencia delictiva en el primer cuatrimestre del año, el jefe de Gobierno ataja de inmediato: “Mira, yo creo que hay cifras oficiales y las encuentras en el sistema nacional.
—¿Se le está yendo la ciudad en el tema de la seguridad?
—No, por supuesto que no. La seguridad de la Ciudad de México si la comparas año con año, mes con mes, periodo de gobierno con periodo de gobierno, está a la baja; no obstante que tenemos más población, más vehículos y unas leyes mucho más laxas.
—¿Cómo explicarle esto a la ciudadanía, cuando sale a comer a un restaurante y de repente vacían las bolsas junto con todos los comensales?
—Porque la amenaza era diferente. Si tú hacías esto y te capturaban, ibas a estar siete u ocho años en prisión. Acabamos de presentar una banda ayer, ¿ya viste cuántos ingresos tiene a prisión en líder de la banda?, entonces de qué sirvieron las capturas.
Por ello insiste en que se trata de un tema de legislación y que su principal error fue el de eliminar la prisión preventiva, que desde su punto de vista, “es un instrumento de control social”.
—Recuerdo que en un momento usted la impulsaba.
—Impulsaba la reforma, sí, pero no lo de [eliminar el tema de] la prisión preventiva. En el tema de la prisión preventiva yo siempre llamé la atención, siempre les dije que la prisión preventiva no debería tocarse.
—¿Entonces por qué se aceptó la reforma penal?
—Porque es hipergarantismo. Se fue al otro extremo.
—¿Hace unos días el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) rechazó que el nuevo sistema penal fuera una puerta giratoria para los presuntos delincuentes?
—Pues nada más hay que ver los números —responde a bote pronto Mancera Espinosa, quien recuerda que hace poco tiempo dejaron en libertad a unos secuestradores.
Pese a ello, el mandatario de la capital del país considera que no todo es malo en el nuevo sistema de justicia, pero se requiere de una gran voluntad política para hacerlo y encontrar un punto de equilibrio.